Por Kevin Mora – Estudiante de la carrera de Ingeniería Electrónica
El uso de distintas plataformas tecnológicas, por la llegada de COVID-19, ha tenido un incremento exponencial; tanto que se prevé que los comercios electrónicos, mejor conocidos como “e-commerce”, crecerán alrededor de un 60% en 2020 (Expansión, 2020). De igual forma, es notorio el aumento en la utilización de las aplicaciones para reuniones en línea, como Zoom, Microsoft Teams, Blackboard, entre otros. Sin dejar de lado lo que esta pandemia nos está dejando negativamente, se debe aceptar que esto nos lleva a una nueva era: la era digital.
La página ha pasado y la nueva realidad es que, aunque la situación se normalice luego de un tiempo, probablemente muchas actividades se mantengan virtuales, al menos en una buena parte. Esto se debe a que se han visibilizado muchos de los beneficios de realizar algunas actividades virtualmente. Eso sí: sin dejar de lado que muchas de las actividades como ir a la iglesia, al estadio, fiestas y demás no mantendrán una modalidad virtual, debido a que su funcionamiento es afectado negativamente. Así mismo, dado que la actual pandemia ha requerido que muchas personas utilicen modalidades virtuales, también significa y ha sido notable que las compañías desarrolladoras han tenido que impulsar más recursos a una mejora continua de su producto. Tal es el caso de Microsoft Teams, que continuamente ha actualizado su aplicación con muchas mejoras de estabilidad.
Si bien es cierto muchas personas no se sienten cómodas con el funcionamiento de algunas actividades en modalidad virtual, esta tecnología nos ha salvado, en cierta parte, a todos. Las reuniones, misas, ferias de empleo y de tecnología, fiestas de cumpleaños y otros, no serían posibles en su totalidad sin contar con estas plataformas y el avance de estas. La mejora en la calidad de sus productos/servicios y el aumento en la cantidad de clientes es visible en el stock market, donde compañías como Zoom tiene un incremento en el valor de sus stocks de más del 50% en los últimos seis meses.
Esta nueva tecnología, cuyo incremento fue forzado por la actual pandemia, si bien tiene algunos contras, es mayormente beneficiosa. Aunque no es nueva, pues ha existido ya por muchos años, su demanda ha aumentado en masa. Actividades como el teletrabajo ha sido crucial para mantener muchas operaciones a nivel mundial. Esta es una nueva realidad en la que ha funcionado incluso como una especie de experimento, pero en ambiente directo de producción, y probablemente muchas de sus usos se mantengan luego de la pandemia. Estamos en una nueva realidad donde muchos se ven afectados por la suspensión de actividades de contacto, pero, por otro lado, la tecnología avanza ahora en una mayor velocidad que antes.