La joya del downhill costarricense, Pablo Aguilar Omodeo, obtuvo el noveno lugar en el campeonato mundial junior de la Unión Ciclista Internacional (UCI), que se llevó a cabo del 9 al 11 de octubre en Leogang, Austria.

El downhill es uno de los deportes más extremos del mundo, el cual consiste en descender lo más rápido posible en una pista con obstáculos naturales y artificiales. El ganador es el que haga el menor tiempo posible en el descenso cronometrado.

Aguilar terminó la competencia con un tiempo de 4:24.726, a tan solo 22 segundos del campeón mundial Oisin O Callaghan de Irlanda del Norte.

El deportista costarricense se colocó como el mejor juvenil del continente americano.

En este torneo participaron los 61 mejores exponentes juveniles del downhill a nivel mundial y la gran final se realizó este domingo durante la madrugada en la reconocida pista de Speedster en Austria.

La pista estaba demasiado resbalosa, pero no nos caímos y logramos una buena presentación. Muchas gracias a todos los que me apoyaron para llegar acá. Muy pronto llevaré el campeonato mundial a Costa Rica, se los prometo."

Durante la ronda clasificatoria (viernes), Pablo quedó en la posición 27 y obtuvo el boleto dorado a la final, pese a sufrir un fuerte caída. El atleta debió ir al hospital para recibir atención médica antes de enfrentar la final de este domingo.

El ciclista de 17 años contabiliza solo cinco años de practicar la disciplina, sin embargo, ya es campeón nacional juvenil y también subcampeón nacional en la categoría élite. Su talento lo ha llevado hasta competencias profesionales en Estados Unidos, donde ya contabiliza algunos podios.

Mediante una amplia conversación la semana pasada en la sección de EntreInstas, el atleta costarricense nos comentó que:

Estuve en Estados Unidos compitiendo con profesionales y logré un cuarto lugar en la categoría Junior. Después de ahí iba para Europa a participar en torneos internacionales y al Mundial de la UCI, pero por la COVID-19 todo se canceló"

Según Aguilar, la reanudación del calendario competitivo lo tomó por sorpresa, ya que no esperaba volver a concursar durante el 2020. A partir de esta premisa, el josefino optó por invertir todos sus ahorros en una bicicleta nueva.

El viaje es un poco caro y fue una noticia que llegó de forma inesperada(...) Para el viaje, la Federación tiene los cupos limitados  y debido a la pandemia, ya no me podían dar el mismo aporte económico que antes”

"Pablito", como le suelen llamar en el gremio, se apoyó económicamente del público y patrocinadores privados para obtener tiquetes, hospedajes, entradas, gastos de la bicicleta, transporte y el costo de las pruebas COVID-19 para llegar a Austria.