Por Joshua Aborn Zindler – Estudiante de la carrera de Ingeniería Electrónica

En la actualidad, la tecnología ya está reemplazado al ser humano con androides. Para fines de esta investigación, se interpreta androides como robots o inteligencia artificial. Esta última se define como un sistema computacional cuya naturaleza se basa en entender la inteligencia humana y lograr auto-aprender de la información que se le otorga. Este sistema está programado para comprender los movimientos y decisiones humanas (Elguea, 1987). Hay bastantes ejemplos que ya muestran cómo se reduce el uso de la ayuda humana y se cambian por robots. Por ejemplo, la empresa Amazon utiliza robots en sus centros de distribución que realizan todas las funciones que cubre el ser humano de una manera más eficiente y con menos margen de error. Además, tienen una empresa subsidiaria llamada Amazon Robotics que ya ofrece este servicio automatizado a otras empresas (Li & Liu, 2016). Esto podría tener un impacto grande en la cantidad de empleados humanos que trabajan en el sector de distribución y logística de paquetes.

“En los sectores de logística, mantenimiento e inspección, los robots autónomos resultan útiles para sustituir a los trabajadores que llevan a cabo labores insalubres, tediosas o inseguras (Mercader, 2018)”. Esta cita nos muestra que ya se han diseñado androides que reemplazan a los ser humanos en ciertos trabajos. Mientras que algunas de las razones son positivas, como reducir riesgos de muerte reemplazando empleos inseguros o insalubres, se sigue buscando robots autosuficientes que puedan aprender de las decisiones y movimientos de los humanos para reemplazarlos. Esto resulta peligroso para los empleados de las industrias de logística, mantenimiento e inspección dado que se podrán ver desempleados.

Elguea (2018) dice que la inteligencia artificial tiene tres distintos objetivos. Entre esos está entender las habilidades mentales del humano, analizar las razones del comportamiento inteligente y, por último, la creación de estos aparatos computacionales que puedan cumplir con la función de los humanos. En general, nos dice que la inteligencia artificial está buscando darle una conciencia a los robots que construyen y, por ende, busca reemplazar el humano. Sin embargo, también existen las tres leyes de la robótica que interfieren con que los seres humanos sean reemplazados por los androides. Estas son que un robot no puede perjudicar o dañar un ser humano, que debe obedecer las instrucciones del humano a menos que interfiera con la ley descrita anteriormente, y que debe proteger su propia existencia mientras no entre en conflicto con la primer o segunda ley (Conde, 2008). El problema está en que un robot que tenga conciencia propia, semejante a un ser humano, eventualmente podría sobrepasar estas leyes al seguir aprendiendo de las decisiones y habilidades mentales de los humanos.

En conclusión, los androides ya están sustituyendo a los seres humanos. Por lo tanto, sí podrían llegar a desplazarnos con los desarrollos tecnológicos nuevos dado que ya están avanzando a intentar crear una conciencia humana en un sistema computacional. Las empresas que buscan utilizar el servicio de Amazon Robotics tendrían que despedir una gran cantidad de empleados para poner en su lugar robots que pueden trabajar hasta 3.5 veces más rápido que los humanos (Li & Liu, 2016). Los mismos objetivos de la inteligencia artificial y los programadores que trabajan en ese sector ya es buscar automatizar todo proceso que se pueda para mejorar la calidad de vida. Sin embargo, al seguir avanzado en esta línea terminamos sustituyendo a los seres humanos con robots en todo tipo de tarea tediosa o por razones económicas.

 

MOXIE es el Canal de ULACIT (www.ulacit.ac.cr), producido por y para los estudiantes universitarios, en alianza con el medio periodístico independiente Delfino.cr, con el propósito de brindarles un espacio para generar y difundir sus ideas.  Se llama Moxie - que en inglés urbano significa tener la capacidad de enfrentar las dificultades con inteligencia, audacia y valentía - en honor a nuestros alumnos, cuyo “moxie” los caracteriza.

Referencias bibliográficas:
• Conde Canaviri, M. M. (2008). Generaciones de La Robótica. Revista de Información, Tecnología y Sociedad, 129. Recuperado de http://www.revistasbolivianas.org.bo/scielo.php?pid=S1997-40442008000200032&script=sci_arttext&tlng=es
• Elguea, J. (1987). Inteligencia artificial y psicología: la concepción contemporánea de la mente humana. Breve historia de la inteligencia artificial, Instituto Tecnológico Autónomo de México. Recuperado de https://www.researchgate.net/profile/Javier_Elguea/publication/330432770_Inteligencia_artificial_y_psicologia_la_concepcion_contemporanea_de_la_mente_humana/links/5d31ea62a6fdcc370a4e2967/Inteligencia-artificial-y-psicologia-la-concepcion-contemporanea-de-la-mente-humana.pdf
• Li, J. T. & Liu, H. J. (2016). Design optimization of Amazon robotics. Automation, Control and Intelligent Systems, 4(2), 48. Recuperado de http://article.acisjournal.org/html/10.11648.j.acis.20160402.17.html
• Mercader Uguina, J. R. (2018). Robótica y riesgos laborales. Archivos de Prevención de Riesgos Laborales, 21(3), 121-122. Recuperado de http://scielo.isciii.es/scielo.php?pid=S1578-25492018000300001&script=sci_arttext&tlng=pt