Las miles de personas que no se apersonan a los establecimientos médicos de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS), pese a haber solicitado una cita, generan pérdidas que ascienden a los 2 mil millones de colones por año.

El dato se desprende de un informe de auditoría realizado por la Contraloría General de la República (CGR) y del cual Delfino.cr tiene copia.

Dicha auditoría analizó la gestión del Servicio de Consulta Externa en siete Áreas de Salud Tipo 3 (AST3), en áreas como cumplimiento de indicadores de oferta y demanda, equidad en la oferta de servicios, satisfacción del usuario y mecanismos utilizados para la gestión de las listas de espera.

Dato D+: Los AST3 son áreas de salud que por su localización, no tienen hospitales regionales o periféricos a los cuales referenciar pacientes. Si su atención no es buena o es insuficiente, la persona debe ser enviada a uno de los hospitales nacionales o especializados que se supone deberían descongestionar.

De acuerdo con los datos del 2017, el Área de Salud Tipo 3 que más citas perdidas tuvo fue la de Tibás-Uruca-Merced con casi 10 mil citas perdidas, de las cuales poco menos de 4 mil fueron sustituidas.

El año anterior la tarifa por consulta en las AST3 era de 37.476 colones, de modo que los usuarios de esa área de salud causaron un perjuicio económico a la Caja que asciende a los 232 millones de colones.

En contraparte, la Área de Salud Coronado tuvo 4.229 citas perdidas durante el 2017, de las cuales 1.985 fueron sustituidas. De ese modo, la pérdida económica para la Caja fue de 84 millones de colones.

En total el perjuicio económico para la Caja por las 53.668 citas perdidas en los AST3 durante el 2017 ascendió a los 2011 millones de colones, aunque la cifra final fue de 1198 millones de colones, debido a que las 21.693 citas de sustitución ahorraron casi 813 millones de colones.

Metas no cumplidas

La investigación de la Contraloría permitió determinar que solo dos de las siete áreas de salud analizadas cumplieron con las metas anuales sobre citas perdidas y sustitución de estas, establecida en la Guía para la Gestión de los Servicios de Consulta Externa.

Según ese documento, para cumplir la meta anual sobre citas perdidas se requiere que el AST3 registre un número de citas perdidas inferior al del año previo. Eso se logró únicamente en las áreas de Salud de Mata Redonda-Hospital y la de Tibás-Uruca-Merced.

Por otro lado, para cumplir la meta de sustitución se requiere que las Áreas de Salud sustituyan entre el 85 y el 100% de las citas perdidas, logro no alcanzado por ninguna AST3.

El mayor inconveniente para la Caja a la hora de sustituir las citas perdidas es que los pacientes no cancelan con antelación, sino que optan por no presentarse. Ello impide contactar a una persona en lista de espera para adelantarle la atención.

Asimismo, la población en general desconoce de la posibilidad que existe de presentarse al establecimiento de salud, sin cita, y señalar que desea ser atendido mediante el método de sustitución. De esa forma, si alguna persona con cita programada no se presenta, puede ser atendido en ese cupo.