Competirá en la categoría de categoría de Mejor Película Iberoamericana.
Por segunda vez, una película costarricense fue nominada al Premio Goya. La ceremonia de premios cinematográficos más célebre de España está programada para febrero del 2025 y premiará, entre otras categorías, a la Mejor Película Iberoamericana.
Junto a films de Argentina, Brasil, Chile y Uruguay competirá por ese premio el largometraje costarricense Memorias de un cuerpo que arde, dirigido por Antonella Sudasassi Furniss. La directora ya había alcanzado la nominación al cotizado premio en 2019 por su primer película, El despertar de las hormigas.
Memorias de un cuerpo que arde fue estrenada este año en Festival Internacional de Cine de Berlín. Desde entonces no ha dejado de cosechar palmas y reconocimientos y hoy día suma uno más, siendo reconocida como una de las películas más destacadas de la región iberoamericana en 2024.
El film, cuyo valor como herramienta educativa y de concientización social ya ha sido puesto de manifiesto por Naciones Unidas, alcanzará ahora un nueva vitrina internacional para seguir sumando olas, abriendo así más puertas a la joven directora costarricense, quien ya se ha consagrado como una de las más grandes figuras en la historia del cine tico.
