Experto Víctor Küppers participó en charla de fondo del Club de Gestores de Talento Humano, realizado por BAC.
Si hay algo que los directores de los departamentos o áreas encargadas de gestionar el talento humano en las empresas no deben hacer es “tirar la toalla”.
Su trabajo debe estar enfocado en convencer, educar y concientizar, tanto a los directores de las empresas, como a los mismos colaboradores, que, si no se fomenta una cultura de trabajar con alegría, no será posible tener un recurso humano motivado y eso redundará en la pérdida de beneficios económicos en las empresas.
Esa fue uno de los principales consejos que el conferencista internacional Víctor Küppers resaltó en su conferencia “Metamorfosis corporativa: un viaje hacia el bienestar”, que fue la charla de fondo del Club de Gestores de Talento Humano, realizado por BAC, el pasado 7 de noviembre, y en el que participaron más de 400 encargados de las áreas de recursos humanos y gerentes de empresas clientas del banco.
Küppers, nacido en Eindhoven y residente en España, se autodenomina un formador con vocación y es un motivador mundialmente famoso. Es administrador de empresas y doctor en humanidades.
Laura Moreno, vicepresidenta de Relaciones Corporativas de BAC, comentó:
El Club de Gestores de Talento Humano es uno de los espacios que BAC abre a sus clientes para que puedan escuchar y aprender de expositores altamente reconocidos y de esa forma obtener información valiosa que les permita desarrollar sus labores dentro de las empresas. En esta oportunidad, con Víctor Küppers, quisimos darle un giro a la charla, para enfocarnos más en la parte humana, en cómo es posible impulsar a los colaboradores a dar su máximo potencial en beneficio de ellos mismos y de las organizaciones”.
Küppers desarrolló el concepto de la psicología positiva cuya tesis principal es que, si una persona está animada, saca lo mejor que tiene adentro y eso redunda en un beneficio para sí misma y para las organizaciones. Para lograrlo deben potenciar tres características: intentar ser extraordinario en lo que hacen, vivir con alegría y ser buena persona.
En esa labor, los gestores de Talento Humano tienen una gran responsabilidad y por eso compartió los siguientes consejos:
- No tirar la toalla: En ocasiones, los directores de recursos humanos deben luchar contra una cultura en la que “prima el número”, las ventas y los beneficios, pero no las personas. Por eso, deben hacer entender a los altos ejecutivos que pueden llegar a tener buenos resultados a través de las personas.
- No concentrarse en lo que no pueden cambiar: Si saben que hay elementos dentro de la cultura de la empresa que no pueden modificar, entonces concentrarse en los que sí pueden cambiar.
Educar a los directores generales: La mejor forma es convenciendo, sensibilizando y concientizando, más cuando los directores o gerentes generales de las compañías tienen la presión de obtener resultados en el corto plazo. - “Se trata de sentido común: si cuidas a las personas, trabajan mejor; cuando trabajan mejor, los clientes están más contentos; cuando los clientes están más contentos, vuelven, y cuando vuelven los clientes, los números llegan, pero todo empieza por cuidar a las personas porque la primera responsabilidad social de una empresa es cuidar a las personas que trabajan en ella”, comentó Küppers.
El conferencista reconoció que para algunas empresas decir que sus colaboradores son el principal activo es solo una “cuestión estética” y que cambiar eso requiere tiempo, pero es una lucha que vale la pena.