Por Sebastián Barranco Vega - Estudiante de la carrera de Derecho

El Estado de derecho es aquel en el que las leyes están por encima de cualquier institución o persona, incluso hasta del Estado; esta tiene como por características ofrecerles justicia e igualdad a los ciudadanos, asegurar que todo ciudadano tenga una vida digna, verificar que cada procedimiento legal que se haga se lleve con transparencia y que nada ni nadie está por encima de la ley. ¿Ahora cuál es la duda para no poder confiar en el Estado de derecho?, que no se respete del todo las leyes, que haya corrupción en los que tienen más poder como por ejemplo la policía —siendo sobornada para no investigar a cierta persona— o un golpe de Estado que se traiga abajo todo. No obstante, a pesar de esto, para mí un Estado de derecho sí puede llegar a funcionar y aquí el porqué.

Con el Estado de derecho cualquier persona se puede garantizar un futuro seguro, ya que en este no se toman decisiones de un momento a otro; las leyes son visibles para todos los ciudadanos, se puede asegurar que a nadie le van a quitar ningún privilegio sin que haya una ley ya existente para eso; y  la ley vas a ser justa e igualitaria para cada persona.  Hoy esto funciona perfectamente, ya que la población es diversa, algunos tienen tradiciones diferentes, el color de piel es diferente, la sexualidad es variada, pero al final todos son personas y las leyes los van a ver con los mismos ojos a todos; nadie va a ser juzgado ante la ley por ser diferente a otro.

Con respecto a la corrupción y el abuso de poder, sería muy difícil que pase, ya que la población conoce las leyes, todos saben sus derechos y deberes; además, el poder está dividido en tres órganos (Ejecutivo, Legislativo y Judicial), por lo que ninguno va a obtener más poder que otro.  Por otra parte, existe una mayor libertad de expresión, ya que como podemos ver en países como Cuba y Venezuela, el simple hecho de estar en contra del presidente o sus acciones ha llevado a algunos a la cárcel o —en el peor de los casos— a la muerte, pero esto no pasaría en un Estado de derecho,  porque va en contra de la ley.

¿Qué pasa en un país donde no hay Estado de derecho?, todo lo contrario a lo anterior mencionado; políticos o policías corruptos que actúan en su propio beneficio y no del pueblo, por lo que cualquier persona puede estar en peligro, ya que no se respeta su identidad. Ejemplos de esto sería tener una casa y saber que el gobierno se la puede quitar así la ley diga lo contrario; que a los extranjeros, personas con diferente sexualidad o diferente color de piel se les trate distinto a los residentes del país, pudiendo incluso aprovecharse de ellos; que haya trabajadores sobreexplotados o despedidos sin razón; o que haya un declive económico.

En conclusión, un Estado de derecho beneficia a lo que más importa en el país: su pueblo;  no solo a los que tienen más poder. Es donde hay un gobierno menos corrupto y con mayor transparencia en la toma de decisiones y un mayor crecimiento económico. Los resultados de tener un buen manejo del Estado de derecho se pueden ver en países como Dinamarca, Finlandia y Alemania, donde el gobierno y la gente están felices y con un país que siempre sigue adelante.  En cambio, podemos ver países como Venezuela, Afganistán y Pakistán, donde vemos todo lo contrario: un gobierno corrupto, donde el pueblo es el más afectado.

 

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