Dirección de Cambio Climático ha sido cuestionada por diferentes sectores durante la Administración Chaves Robles.

La Dirección de Cambio Climático (DCC) quedará sin jerarca luego que su director, Iván Delgado Pitti, se acogiera a un permiso sin goce de salario durante seis meses.

La noticia fue confirmada por el departamento de prensa del Ministerio de Ambiente y Energía (Minae), y pese a la consulta de Delfino.cr sobre las razones de su salida y si alguna persona quedaría a cargo de la DCC, no se obtuvo respuesta.

Delgado Pitti sale de la Dirección de Cambio Climático apenas tres meses antes de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2023 (COP 28), que se llevará a cabo en Emiratos Árabes Unidos, un evento en el que los gobiernos del mundo se juntan para acordar políticas para limitar el aumento de la temperatura global y adaptarse a los impactos asociados con el cambio climático, y en el que Costa Rica solía tener un rol protagónico.

Dirección cuestionada

En setiembre del año anterior este medio de comunicación consultó al jerarca del Minae, Franz Tattenbach Capra, sobre el rol que tendría la dirección en la administración Chaves Robles, a lo que respondió que le parece "muy importante y fundamental para seguir con la ejecución del plan de descarbonización".

No obstante, manifestó que están en proceso de  aumentar el personal, debido a que durante el gobierno anterior se manejó por consultorías, entonces cuando estas y los proyectos de la cooperación internacional se acaban, la oficina queda vacía. En aquel momento señaló:

Hay que reajustar la oficina, que se meta más a la gestión de la implementación ahora de los grandes temas que nos van a traer deducción en emisiones, una electrificación del transporte ya sea público o privado o público".

Para organizaciones y personas involucradas en la política climática, este Gobierno ha descuidado la dirección y el tema ambiental en general.

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En una conversación en febrero de este año, el director de la organización sin fines de lucro especializada en gobernanza climática La Ruta del Clima, Adrián Martínez Blanco, dijo a este medio de comunicación que la DCC ha tenido una "transformación silenciosa" en donde pasó de ser un centro de liderazgo climático a una oficina de poco involucramiento que maneja muchos proyectos de cambio climático.

"En la administración anterior la llenaron de 22 consultores y no le dieron sostenibilidad, por cuanto fueron contratos financiados por la Cooperación Internacional, los cuales tenían productos y tiempos específicos a cumplir y por ende nunca fueron funcionarios de la DCC", explicaron desde el Minae anteriormente.

El experto indicó que, aunque no se ha eliminado la dirección, han notado más desinterés del Poder Ejecutivo en la ambición climática del país y el olvido de proyectos por parte del Minae.

Ese es funcionalmente la estrategia que tiene este gobierno para desgastar y de legitimar, el trabajo que se venía dando. Lo que hemos visto y lo que sabemos es que hay una falta de comunicación una falta de respuesta".

Agregó que consultores, activistas y personas involucradas en programas como el de carbono neutralidad, por ejemplo, hace tiempo que no reciben respuesta. "Se habla de una desconexión funcional entre la DCC y programas importantes".

Además señaló acciones controversiales de las autoridades de Gobierno en el tema climático como lo son los comentarios a favor del gas natural, la activación de estudios de pesca de arrastre, el rechazo al Acuerdo de Escazú y el descarte del Tren Eléctrico Metropolitano, por ejemplo.

Pasamos de tener una agenda no solo ambiciosa, sino que se movía y la podíamos percibir, a un letargo enlodado que parece que nos lleva a la desidia".

Martínez Blanco comentó que en la COP 27, que se llevó a cabo en noviembre del 2022, para la sociedad civil fue imposible conversar con el ministro de Ambiente y Energía, ni con los dos negociadores que llevó la delegación nacional, y en el evento Costa Rica fue un "silencio total", al punto que ni siquiera conocieron la agenda que llevaron, algo que consideró como inédito luego de estar presente en estos eventos desde 2014.

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Agregó que a nivel interno hace mucho el Minae no da cuentas de qué ha sucedido con las metas de programas como el de Contribución Nacionalmente Determinada (NDC) de Costa Rica, ni tampoco actualización del Plan Nacional de Descarbonización.

Ese silencio es lo que define ahora la política y la ambición climática de Costa Rica. Eso posiblemente nos está llevando a erosionar y a que se caiga pedazos por pedazos lo que hemos construido en las últimas tres décadas de acción climática en el país".

La Dirección de Cambio Climático es la dependencia del Minae encargada de coordinar y gestionar la política pública de cambio climático en Costa Rica. Esta oficina fue creada en 2010 mediante Decreto Ejecutivo Nº 35669.

Dentro de sus funciones están:

  • Coordinar y gestionar la política pública de cambio climático, promoviendo la integración de una agenda intra-ministerial de cambio climático en sus distintas dimensiones
  • Apoyar al Ministro o Ministra Rectora en la ejecución de la agenda prioritaria a nivel nacional e internacional de cambio climático.
  • Ejercer la focalía de la Convención Marco de Cambio Climático en sus distintos ámbitos y apoyar al ente rector en el proceso de negociación bajo la Convención y sus instrumentos.
  • Fungir como Secretaría Técnica del Mercado Doméstico de Carbono y sus estructuras.
  • Diseñar y administrar el Registro de Créditos de Carbono y/o Unidades de Compensación que se generen o transen en el territorio costarricense con el fin de evitar la doble contabilidad y establecer los vínculos con el Sistema Nacional de Métrica de Cambio Climático (SINAMECC).
  • Coordinar e impulsar la implementación del Programa País Carbono Neutralidad con los diversos actores y sectores del quehacer nacional y de otros programas que se generen para consolidar la implementación de la acción climática.
  • Promover espacios de participación multisectorial que fomenten el involucramiento del sector privado, sector público, academia y sociedad civil en la acción climática.