Por Monique Fernández Castro – Estudiante de la carrera de Ingeniería Química
El agua es vital para los seres vivientes y debido a los aumentos de población, contaminación de cuencas y el cambio climático, se han visto afectadas las fuentes de agua potable para las personas y seres vivos. Esto está sucediendo a nivel global y es por eso que muchas empresas están buscando como solucionar el déficit de agua dulce para el consumo. En muchas zonas de Costa Rica, como Guanacaste y poblados densos en ciudades, no tienen facilidad de acceso a fuentes de agua, algunas por sequías abundantes, otras por tener nacientes de agua contaminadas. Según datos del 2018, un aproximado del 7.5% de la población total no tiene acceso a agua potable, y son las zonas urbanas de Puntarenas las que menos acceso tienen a agua potable (Mora y Portuguez, 2019).
Una de las nuevas ideas para poder obtener agua es cosechar agua del aire. Esta idea es relativamente nueva. Según estudios, la atmósfera puede contener un aproximado de 1.29 x 1016 litros de agua en diferentes formas como nubes, neblina y vapor de agua (Halford, 2018). Este tipo de prototipos se han probado en zonas áridas como desiertos, así como en zonas urbanas. Uno de los más reconocidos prototipos es el que utiliza un marco metálico orgánico o MOF, por sus siglas en inglés (Service, 2017). Este sistema utiliza un cristal poroso que atrae al agua del aire durante la noche, y en el día utiliza el mismo calor para condensar el agua almacenada, con lo cual se logra obtener aproximadamente 1.3 litros de agua (Sanders, 2019).
Un factor muy importante que se tiene que considerar es el factor meteorológico para poder aprovechar al máximo los sistemas de recolección. Por ejemplo, es importante tener en cuenta tanto la humedad de la zona y las condiciones atmosféricas como la cantidad de nubes durante el día y la noche. Costa Rica es conocida por ser un lugar con microclimas y variaciones climáticas variables de una zona a otra. Por ello, poner un mismo sistema de captación en Guanacaste y en el Guápiles no necesariamente va a tener la misma eficiencia, cada zona tiene condiciones climáticas y características atmosféricas diferentes.
Existen varios aspectos importantes para lograr esa transformación de aire a agua, entre ellos, se incluye el manejo del punto de rocío del agua. Según un estudio de Bautista-Olivas et al (2010), es importante inducir el punto de rocío al vapor de agua en el ambiente y, al trabajar con una zona con alta humedad relativa en el aire, se puede obtener agua con un menor consumo eléctrico por parte de un sistema de condensación que utiliza un serpentín.
Según indica Sanders (2019), de poder escalar el sistema de cosechado para una zona con baja humedad relativa, como Guanacaste, se podría obtener de hasta 200 litros de agua con un sistema del tamaño de una refrigeradora casera. Este tipo de proyectos son sumamente importantes para el futuro incierto de la humanidad y los recursos limitados. La investigación continua y mejora de equipos permite disminuir costos de producción y operación, para lograr un equipo accesible y funcional para la sociedad.
Fuente: https://climatekids.nasa.gov/water-cycle/
