Por Luis Fernando Rodríguez Hernández - Estudiante de la carrera de Ingeniería en Sonido
La situación actual de pandemia en la que vivimos ha hecho que productoras, artistas y medios de entretenimiento hayan tenido que reinventarse y evolucionar para poder mantenerse en pie y llegar a su público. A nivel nacional la cantidad de espectáculos públicos que se han visto afectados de manera directa podría resultar incontable.
En Costa Rica, se vieron obligados a cancelar por completo la realización de conciertos con bandas internacionales como Guns N’ Roses, Amon Amarth y Powerwolf, Rhapsody, Pennywise, Cuarteto de Nos y Jesús Adrián Romero, entre muchos otros, así como fiestas masivas que contaban con la participación de artistas de alto calibre a nivel mundial como Grito Latino, Transitarte, Art City Tour, entre otros; lo que conlleva personas que perdieron trabajo, contratos, y llegaron a ser pérdidas millonarias. Sin dejar de lado que esto produjo la desilusión de muchas personas por no poder ver a sus artistas favoritos en dichos eventos. A nivel interno, conciertos de bandas locales autogestionados, presentaciones de solistas y demás se han visto afectados de igual forma.
Sin embargo, muchas bandas y artistas se han logrado evolucionar, adaptarse y reinventarse ante esta pandemia. Las transmisiones de música en vivo a través de redes sociales, bajo el nuevo concepto de “concierto virtual” resultó ser el medio de entretenimiento más llamativo y eficaz de este 2020 para seguir llegando a seguidores y hogares. A gran escala eventos masivos como el Hellfest en Francia, La Barca Metal Fest y Hate Fest en México, y el gran Wacken Open Air en Alemania, se las han ingeniado para decir presente en esta nueva modalidad de eventos.
Haciendo un trabajo en conjunto con las bandas que han sido invitadas a dichos eventos, han podido presentar sesiones “en vivo” como si estuvieran presentándose en tarima en un evento regular, esta vez desde la comodidad de su casa y a través de la pantalla. Es de reconocer el compromiso y profesionalidad de bandas nacionales como Nostoc, Heresy, Liberosis, The Rockets, y muchas más, que han sido o serán parte de eventos internacionales, presentando material de primer nivel y dejando en alto el nombre del país.
En un plano socioeconómico es notable como los festivales masivos eran de gran ayuda para ciertas regiones. Por ejemplo, el Wacken Open Air en Alemania, que se realiza en más de 240 hectáreas de terreno en Schleswig-Holstein y al que asisten entre 75.000-85.000 personas de todas partes del mundo, contribuye con el turismo en dicho país y con el desarrollo económico de los lugares aledaños, sin dejar de lado los más de 5000 empleados que forman el staff del evento.
Este año debido a la situación global, la productora se vio obligada, por primera vez desde el año 1990, a no hacer el festival presencial, pero no se quedaron con las ganas de regalarnos a todos sus seguidores de algún modo sentirnos cerca de tarima. Realizaron una seguidilla de presentaciones cortas de bandas que han sido parte del festival en algún momento y, a la vez, realizaron una simulación de público con luces en movimiento y sonidos de ambiente junto a la música interpretada por los artistas. Así mismo, presentaron clips de conciertos memorables de años anteriores, las cuales tuvieron un gran recibimiento de todos sus fans.
La adaptación a situaciones difíciles es parte de la evolución humana, como individuos y colectivamente. Si esta es la nueva modalidad para poder ver a nuestras bandas favoritas, que así sea, que la música nunca se detenga y que el arte no encuentre barrera que no pueda derribar, ahora desde la comodidad de nuestra casa cuidando de nosotros y de los nuestros.
