Por Kelly Araya Aragón – Estudiante de la carrera de Derecho

No queda duda de que todo costarricense ha hecho un trámite gubernamental y se ha sentido agobiado saliendo de las oficinas, o no queremos ni siquiera terminar el proceso o simplemente lo dejamos hasta que nuestra frustración se nos pase. El sistema público costarricense ha sacado lo peor cada uno de nosotros y nosotras, que es el mal humor, por eso soñamos con un sistema en donde las personas no hagan fila desde las 4 a.m. a las afueras de un centro de salud o que cuando llevemos documentación no nos manden a tres lugares diferentes o nos digan que no completamos alguno de los requisitos.

El autor de El shock del futuro afirmó la llegada de un fuerte cambio a nivel tecnológico “una percepción de un cambio excesivo en un periodo demasiado breve” (Toffler, 1970). Toffler básicamente nos advirtió de la cantidad de cambios que tendrán las organizaciones, las cuales deberán adaptar sus servicios al cambio para poder mantenerse en vigencia y bajo una buena organización. Pero nuestros sistemas se encuentran rezagados desde hace mucho tiempo, lo que implica un desafío para el Estado y los que hacemos uso de tales servicios.

La tecnología es la mejor manera con la que la organización puede perfeccionar la calidad de los servicios, y de acuerdo con el presidente de TEDxPuraVida “es la mejor manera de implementar trasparencia” (Sasso, 2017), por el hecho de que se puede publicar en tiempo real diferente tipo de información de interés público. Actualmente el acceso a la información pública es casi nula y hace que los casos de corrupción sean más comunes, la misma Constitución Política, artículo 30 establece el derecho que tenemos los ciudadanos sobre la información de interés público.

Por otro lado, tenemos la gran cantidad de documentos que sigue requiriendo el Estado en cualquier trámite que se realice, mucha de la cual sigue siendo en papel. La cantidad de trabajo que genera dentro de la Administración es algo inimaginable, los funcionarios públicos tienen que seguir lidiando con esto y los administrados muchas veces tenemos que lidiar con la gran frustración, dado que ni siquiera los propios funcionarios se ponen de acuerdo en si los documentos están completos o no. La gran cantidad de veces en la que puede ser rechazada una persona es absurda, para no decir ridícula.

Cada día que el mundo tecnológico avanza dos pasos, el país se queda cada vez más atrás, generando una carga que se pasa de presidente en presidente, la cual al final en cada Administración no se considera “prioridad”, por lo cual el sector público sigue estancado y se sigue malgastando dinero que no deberíamos estar gastando y recursos que deberíamos estar ahorrando. Sería injusto no reconocer algunos esfuerzos del gobierno como la implementación de la factura electrónica o EDUS, lo que se hace preocupante es la velocidad a “pasos de bebé” que vamos.

En conclusión, si queremos empezar a modernizar, y si hablamos en palabras grandes de automatizar lo que más se pueda el sistema público costarricense, debemos empezar a hacer cambios y reinvenciones internamente, desde los sistemas que se utilizarán, las tareas dentro de la organización que realmente sólo requieren de un sólo colaborador y no de cuatro o de las acciones operativas, que harían que el sistema se logre mover y así generar un servicio más eficaz. Le tenemos que dejar claro al conservador sistema de nuestro país que las nuevas necesidades implican la eliminación de ciertos procesos e incluso personal, pero como bien sabemos es casi imposible que una organización sobreviva sin adaptarse al cambio, por eso requerimos de una transformación exitosa y estar pendientes de cómo se puede mejorar cada día.

 

MOXIE es el Canal de ULACIT (www.ulacit.ac.cr), producido por y para los estudiantes universitarios, en alianza con el medio periodístico independiente Delfino.cr, con el propósito de brindarles un espacio para generar y difundir sus ideas.  Se llama Moxie - que en inglés urbano significa tener la capacidad de enfrentar las dificultades con inteligencia, audacia y valentía - en honor a nuestros alumnos, cuyo “moxie” los caracteriza.

Referencias bibliográficas:
  • Sasso, R. (2017, septiembre). Tecnología en el sector público. La Nación. https://www.nacion.com/opinion/foros/tecnologia-en-el-sector-publico/4MUJRWABHFFKZKKNDFKHBJDWHI/story/
  • Toffler, A. (1970). El shock del futuro. P&J. http://ciudadanoaustral.org/biblioteca/06.-Alvin-Toffler-El-shock-del-futuro.pdf