Por Jossette Villalobos Sánchez  - Estudiante de la carrera de Odontología

El temor a la consulta o a la realización de procedimientos dentales siempre ha sido un reto en el día a día de los profesionales en odontología, debido a que la mayoría de los tratamientos están relacionados con situaciones incómodas, estresantes o que causan dolor. Una de las alternativas de gran utilidad actualmente es la hipnosis dental, también conocida como hipnodoncia. Esta es una opción para pacientes que no desean una infiltración anestésica directa, que buscan un mejor manejo del dolor, que tienen alergias o reacciones, pacientes en lactancia o que simplemente buscan un estado de relajación ante el tratamiento.

Las principales ventajas de la hipnosis en odontología son la comunicación mejorada, percepción mínima o nula del dolor, baja considerable en los niveles de ansiedad, analgesia posoperatoria prolongada, mejor control de malos hábitos bucales, manejo de movimientos involuntarios de la lengua y músculos durante la consulta, mayor comodidad para el paciente, dominio de náuseas o vómito, relajación del cuerpo y la mente, y capacidad de respuesta ante indicaciones del profesional, entre otros beneficios presentes.

Es importante refutar los mitos que existen, pues durante mucho tiempo se creyó que las personas que son sometidas a procesos hipnóticos están inconscientes, que no se encuentran conectadas a su entorno o que están en contra de su voluntad, lo cual es completamente falso, ya que el paciente se encuentra consciente durante todo el proceso, se maneja siempre bajo su consentimiento y autorización, está familiarizado con lo que sucede a su alrededor y tiene la capacidad de responder ante cualquier indicación brindada, además de ser un procedimiento completamente inofensivo y no invasivo.

El procedimiento y la función de la hipnosis se resumen en un estado de relajación máxima, el paciente es capaz de recibir las indicaciones del profesional, las cuales van a ser procesadas por el cerebro para experimentar cambios en sus sensaciones, pensamientos, percepción y conducta. El proceso hipnótico se puede llevar a cabo por medio de objetos, aromas, imágenes, sonidos e indicaciones. El desarrollo de las técnicas de hipnodoncia se da de manera sencilla, buscando siempre el mayor punto de relajación del paciente; cuando el odontólogo inicia una hipnosis se realizan ejercicios de respiración, se debe ambientar el entorno con aromas y sonidos relajantes, el tono de voz utilizado al dar las indicaciones debe ser un tono suave, calmado y lento, para que el proceso sea exitoso. Debemos dejar atrás los mitos sobre la hipnosis, siendo este un proceso normal al cual nos enfrentamos diariamente, pues durante el día vivimos episodios de trance sin saberlo, con objetos de la vida cotidiana como el celular, las luces, imágenes que absorben nuestra concentración, sonidos y demás.

La hipnosis en odontología es una de las alternativas de coayuda a los tratamientos dentales que va siendo cada vez más usada, con el propósito de hacer la consulta más placentera y los tratamientos menos invasivos. Al ser un proceso sencillo, cualquier profesional capacitado lo puede aplicar, mejorando la atención de los pacientes y creando un ambiente ideal de relajación para quien lo utilice.

MOXIE es el Canal de ULACIT (www.ulacit.ac.cr), producido por y para los estudiantes universitarios, en alianza con el medio periodístico independiente Delfino.cr, con el propósito de brindarles un espacio para generar y difundir sus ideas.  Se llama Moxie - que en inglés urbano significa tener la capacidad de enfrentar las dificultades con inteligencia, audacia y valentía - en honor a nuestros alumnos, cuyo “moxie” los caracteriza.