La industria de telecomunicaciones emplea de forma directa a 10.761 personas y representa un 2.1% del Producto Interno Bruto costarricense, En octubre de 2020, la Cámara de Infocomunicación y Tecnología (Infocom) alertó de la falta de decisión sobre la agenda pendiente, como:
- La construcción conjunta y articulada del Plan Nacional de Desarrollo de las Telecomunicaciones (PNDT).
- La elaboración de una hoja de ruta y un cronograma para el desarrollo de la tecnología 5G en Costa Rica.
Para la Cámara, es necesario reconstruir confianzas y recordar que por ley el sector de telecomunicaciones tiene tres actores: la rectoría del MICITT, la Superintendencia de Telecomunicaciones (SUTEL) como regulador y los operadores; y que todos deben procurar actuar coordinadamente en busca de una efectiva ejecución de la política pública. Este correcto engranaje ha estado ausente durante el último año.
“Ahora más que nunca el país debe tener el desarrollo de la industria como una prioridad de cara al
futuro. Sin un mayor despliegue de telecomunicaciones, será difícil pensar en reactivación económica,
en especial cuando el mundo da pasos hacia nuevas tecnologías como 5G, y Costa Rica no puede
quedarse atrás”, señaló el presidente de Infocom, Mario Montero.
El 12 de mayo anterior, se dio a conocer que un análisis técnico realizado para la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sutel) concluyó que Costa Rica tendrá pérdidas por 704 mil millones de colones ($1134 millones) al año 2024, si el Poder Ejecutivo no toma decisiones prontas para recuperar las frecuencias ociosas e instruye a la Superintendencia a realizar los concursos para la asignación de todas las frecuencias 5G.
Para la líder en Comunicación de Movistar Costa Rica, Marianella Cordero Vargas, casi que el 100% de lo que hacemos ya pasa por las redes. "De ahí la importancia de invertir en una excelente red".
Por ejemplo, en el último año, la cobertura de redes de fibra óptica para llevar Internet de banda ancha hasta los hogares, escuelas y comercios costarricenses aumentó un 146%; pasando de 78.000 a más de 192.000 kilómetros de redes de fibra óptica en todo el país.
No obstante, las redes que usábamos antes no pueden ser las mismas que transmitirán y soportarán el abrumador tránsito de datos que generamos y demandamos ya.
Para mejorar la capacidad de transmisión de datos, y hacer que las redes no solo sean sólidas sino también confiables, es importante impulsar este sector y digitalizarnos de verdad", indicó.
Enfatizó, además, que digitalizarse es tomar ventaja de la tecnología para hacer más cosas.
Consideramos que los esfuerzos que cualquier país quiera hacer para reactivar económicamente su situación post pandemia debe tener como elemento unificador de sus políticas a la tecnología y las telecomunicaciones", concluyó.
Día a día
Las telecomunicaciones se convirtieron en la herramienta a la que acudimos en busca de soluciones durante la pandemia: la solución para teletrabajar, para mantener el contacto entre burbujas, para informarnos constantemente, para buscar algo de evasión con entretenimiento, para seguir estudiando, para conocer las restricciones vigentes y tener acceso a datos que nos permitieran tomar decisiones.
Actualmente por ellas o a través de ellas pasan todas nuestras actividades vitales. La líder en Comunicación de Movistar Costa Rica, Marianella Cordero Vargas, dice que a la compañía "la pandemia nos encontró muy bien justo en el momento de mayor demanda de nuestros servicios".
Es cuando mejor cobertura y mejores beneficios pudieron encontrar nuestros clientes. Tuvimos la capacidad de responder con redes robustas y seguras, y orientar nuestro servicio al cliente a una mayor atención en canales digitales".
Cordero Vargas, señala que tener acceso a la información a través de las redes, y al poder enviar y recibir datos, la pandemia se ha vivido con un menor grado de incertidumbre.
El tener acceso a esa información de forma segura e inmediata hace toda la diferencia, con cualquier otra pandemia que la humanidad haya atravesado en el pasado".