Un robot que utiliza inteligencia artificial, sumado a imágenes de infrarrojo cercano y ultrasonido para llevar a cabo extracciones de sangre automáticas e insertar catéteres en pequeños vasos sanguíneos, es el resultado de una investigación desarrollada por un equipo de la Universidad de Rutgers (Estados Unidos).
El dispositivo buscará eliminar los problemas comunes de las extracciones de sangre cuando se realizan manualmente. El acceso a los vasos sanguíneos resulta un desafío en pacientes como los pediátricos (niños y niñas), la población de edad avanzada y aquellos que padecen enfermedades crónicas.
Según los resultados del estudio publicado en la Revista Nature Machine Intelligence, en los grupos antes mencionados, la tasa de precisión del primer intento de insertar con éxito una aguja es inferior al 50 por ciento y a menudo se necesitan al menos cinco intentos más, lo que lleva a retrasos en el tratamiento y posibles complicaciones en los pacientes.
Martin Yarmush, investigador que participó en el estudio, afirmó que: “Nuestro equipo demostró que el dispositivo puede identificar con precisión los vasos sanguíneos, mejorando las tasas de éxito y los tiempos de procedimiento en comparación con profesionales expertos en atención médica, especialmente con vasos sanguíneos de difícil acceso”.
Cabe resaltar que el robot, cuyo tamaño es ideal para una mesa de trabajo, utiliza ultrasonidos e imágenes de infrarrojo cercano para obtener fotografías del tejido e inteligencia artificial con el propósito de interpretar las imágenes, detectar vasos sanguíneos, calcular su profundidad y su tamaño.