Un estudio transversal publicado por Sports Medicine Australia analizó los resultados de 2.525 atletas olímpicos evaluados durante diez años en el Instituto de Medicina y Ciencias del Deporte. La investigación buscó identificar alteraciones bioquímicas en deportistas considerados la élite del rendimiento físico.

El análisis incluyó marcadores hematológicos, metabólicos y bioquímicos, con atletas clasificados según la tipología deportiva: habilidad, potencia, resistencia y modalidades mixtas. Los investigadores definieron las anomalías a partir de umbrales clínicos estándar y compararon los resultados por sexo y por tipo de disciplina.

El estudio reportó que el 62,6% de los atletas presentó al menos una alteración en sus análisis de sangre. Las anomalías más comunes fueron dislipidemia (20,4%), niveles elevados de cortisol (15%), deficiencia de hierro (9,7%) e intolerancia a la glucosa (8,4%).

Al comparar por sexo, los datos mostraron que las mujeres registraron una mayor prevalencia de deficiencia de hierro (16,5% frente a 4,2%), así como más casos de hipercortisolemia. En contraste, los hombres presentaron más episodios de dislipidemia e intolerancia a la glucosa.

Los deportistas de disciplinas basadas en habilidad concentraron la mayor presencia de alteraciones metabólicas dentro del análisis.

Los autores destacaron que, pese a que los atletas olímpicos suelen verse como modelos de salud, estas alteraciones son relativamente frecuentes y requieren seguimiento regular. Señalaron que los análisis de sangre rutinarios permiten una detección temprana y una intervención oportuna en caso de ser necesario.

El estudio también indicó que futuras investigaciones deben determinar el impacto a largo plazo de estas anomalías y su relación con el rendimiento deportivo, además de evaluar tendencias longitudinales que permitan entender cómo influyen los cambios en las cargas de entrenamiento y la nutrición.

El trabajo confirmó que cumplió con la aprobación ética correspondiente, que los atletas firmaron consentimiento informado y que los autores no declararon conflictos de interés ni financiamiento externo.