Organización ha beneficiado a pueblos de Costa Rica, Perú, Colombia, Panamá y Ecuador.
“Esta no es solo una historia de acceso a electricidad: es sobre calidad de vida. Es sobre revertir el daño ambiental, abrir puertas a educación y salud, empoderar a mujeres y fomentar nuevas oportunidades económicas. Todo esto en comunidades que, por décadas, han enfrentado abandono y violencia, sin acceso a soluciones sostenibles ni apoyo real”. El entusiasmo de Iva Alvarado Quirós, cuando habla de la ONG Love For Life es evidente y no es para menos.
Por allá del 2018 Delfino.CR publicó un artículo sobre este proyecto de energía solar y empoderamiento local cuya lectura, hoy, nuevamente, les recomendamos. Love For Life inició labores en Costa Rica de la mano del pueblo indígena Cabécar ubicado en las montañas de Alto Telire y San José Cabécar, en Talamanca. De entonces hasta ahora han seguido caminando, avanzando y cambiando vidas. En este breve audiovisual preparado por Nicole León Zumbado pueden darse una idea del nivel de impacto que ha alcanzado este proyecto en Costa Rica:
Al día de hoy la organización ha logrado impulsar el acceso a energía solar para más de 3.500 personas indígenas de 60 distintas comunidades en América Latina. Como pudieron apreciar en el video, la iniciativa no solo ofrece acceso a electricidad a comunidades marginadas, sino que también empodera a sus habitantes, mejora su salud y preserva su cultura mientras, como bien recordó Iva, enfrentan décadas de exclusión y daños ambientales.
Talmanca- Foto por Alex Mundth, Cortesía de Love for Life.
Energía para un futuro sostenible
Las soluciones están diseñadas para garantizar energía limpia y sostenible satisfaciendo el 100% de las necesidades energéticas de cada hogar, eliminando la dependencia de combustibles fósiles y mejorando la calidad de vida al brindar luz para estudios, refrigeración de alimentos y medicamentos, así como entornos más seguros.
El proyecto ha capacitado a 55 técnicos indígenas para instalar y mantener los sistemas solares, fomentando la autosuficiencia y creando infraestructura impulsada por la comunidad. Adicionalmente se han creado espacios dedicados a la formación y el almacenamiento equipan a las comunidades con las herramientas y los conocimientos necesarios para impulsar su transición hacia la energía limpia y expandir su impacto a nivel regional.
Kekoldi, foto por Iva Alvarado, cortesía de Love for Life.
Impacto en la vida diaria
Entre los logros del programa destacan:
- Mejor salud: La eliminación de lámparas de queroseno y generadores diésel ha reducido enfermedades respiratorias.
- Educación mejorada: Los niños pueden estudiar después del anochecer y acceder a dispositivos electrónicos para el aprendizaje.
- Empoderamiento económico: La electricidad permite actividades productivas como la artesanía y la agricultura regenerativa.
- Protección territorial: Herramientas como GPS y drones ayudan a proteger las tierras indígenas.
Testimonios como el de Felipe Enqueri, de la Nación Waorani, reflejan el cambio significativo dentro y fuera de Costa Rica:
Antes, teníamos que usar los ingresos de la venta de nuestras artesanías para comprar gasolina y mantener los generadores. Ahora podemos cubrir otras necesidades importantes y comprar libros para nuestros hijos”.
Orochico, foto por Nicole Alvarado, cortesía de Love for Life.
“Este esfuerzo va más allá de proporcionar electricidad: es un compromiso con la justicia, la resiliencia y la autodeterminación, que empodera a las comunidades para construir un futuro mejor y más regenerativo”, explica la organización.
Love for Life también destaca la diferencia que un proyecto como este genera en materia de género: “La electricidad reduce el tiempo que las mujeres dedican a las tareas domésticas, lo que les permite continuar con su educación, asumir roles de liderazgo y participar en actividades generadoras de ingresos”, detallan.
Talamanc, fotografía por Alex Mundth, cortesía de Love for Life.
La ONG explica que además naciones indígenas como los Emberá en Panamá y los Secoya en la selva amazónica de Ecuador han sido vulneradas por el desplazamiento y la degradación de sus tierras, “dejando cicatrices duraderas y una lucha continua por su supervivencia física y cultural”. Comparten que este programa de energía solar representa “un cambio transformador, restaurando la dignidad y la autodeterminación mediante la creación de soluciones energéticas descentralizadas y dirigidas por las comunidades. Agregan:
Es el poder de crear alternativas esperanzadoras y oportunidades económicas que estén en armonía con el modo de vida de los pueblos indígenas y la protección de su tierra ancestral”.
El futuro
Tras más de una década de éxito comprobado, el programa tiene como objetivo ampliar su alcance a más familias y comunidades en toda América Latina. Su objetivo es tan claro como siempre: crear soberanía energética, desafiar las inequidades sistémicas y proporcionar acceso directo a energía limpia, segura e independiente a quienes más lo necesitan.
Kekoldi, fotografía por Iva Alvarado. Cortesía de Love for Live.
Sobre Love For Life
Love For Life es una organización independiente y sin ánimo de lucro “dedicada a promover la acción consciente y colaborativa, inspirando prácticas regenerativas y cultivando relaciones armoniosas con uno mismo, con los demás y con la Tierra. Nuestra misión es catalizar la regeneración social, ecológica y espiritual, empoderando a las personas y protegiendo la vida a a través de acciones regenerativas, sistémicas y holísticas”.
Su trabajo se centra en 6 áreas clave: (1) el acceso a la energía solar, (2) la agricultura regenerativa y la soberanía alimentaria, (3) el liderazgo indígena y comunitario, (4) la protección y restauración de ecosistemas, (5) el empoderamiento holístico y (6) el desarrollo de una conciencia centrada en el corazón.
“A través de nuestros programas, trabajamos para construir una Cultura Consciente de la Tierra, en la que toda forma de vida sea considerada sagrada y en la que la humanidad y la naturaleza prosperen en
armonía”.
