El fondo ha recibido críticas porque estará provisionalmente bajo el control del Banco Mundial y además se nutrirá de donaciones voluntarias.

Durante la primera semana de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP28), que se lleva a cabo en Dubái, Emiratos Árabes Unidos, los países acordaron la estructura del fondo para cubrir pérdidas y daños de los países vulnerables provocados por el cambio climático.

Iniciar con ese anuncio fue importante debido a que era uno de los temas principales a tratarse durante la cumbre. Durante la conferencia del año anterior se acordó la creación del fondo pero faltaba ser depurado para su puesta en marcha.

Ahora, los países más ricos deberán anunciar sus contribuciones, pues en en su mayoría son los principales culpables de la concentración atmosférica de gases de efectos invernadero, que generan el calentamiento global.

Mientras las naciones desarrolladas asumen poco compromiso por combatir la crisis climática, los efectos de esta continúan y se hacen cada vez más severos principalmente para muchos países en vías de desarrollo, situados en el sur global, que son los principales impactados por el cambio climático.

Por ejemplo, las sequías son más intensas, las inundaciones pueden ser más frecuentes y el aumento del nivel del mar continua. Estas situaciones provocan que los más afectados requieran más recursos para atender estas situaciones.

En el caso de Costa Rica, el "Primer Informe de Evaluación de Desempeño Ambiental Costa Rica 2023"  de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico​ (OCDE) señaló que de 2016 a 2020, las pérdidas por fenómenos ascendieron a 820 millones de dólares. En el caso de la tormenta tropical Nate, de 2017, causó las mayores pérdidas de los últimos 25 años, equivalentes al 1% del PIB del país.

Además, recordaron que la Política Nacional de Adaptación 2018-2030 indicó que los costos de los fenómenos meteorológicos relacionados con el clima podrían alcanzar entre el 1,6% y el 2,5% del PIB para 2025, incluida la reparación de infraestructuras de agua y transporte dañadas.

El texto de pérdidas y daños fue elaborado por países desarrollados y en desarrollo. No obstante el fondo ha recibido críticas porque estará provisionalmente bajo el control del Banco Mundial y además se nutrirá de donaciones que no serán obligatorias.

Los países más desarrollados, empezando por Estados Unidos, abogaron a hacer las contribuciones voluntarias, y reclamaron ampliar a grandes economías emergentes como China y Arabia Saudita la base de naciones contribuyentes.

Al respecto, el director de la organización sin fines de lucro especializada en gobernanza climática La Ruta del Clima que se encuentra en la COP28, Adrián Martínez Blanco, dijo a Delfino.cr que el fondo carece de los elementos básicos para garantizar el acceso a la justicia a las personas del sur global.

El experto indicó puede ser un mecanismo financiero funcional, pero no promover la justicia, y así resumió la decisión adoptada.

La complacencia que tienen los países es el sentimiento de que se logró algo que es suficiente, y no es suficiente. Es un paso, pero no es un paso hacia la justicia, sino es un mecanismo más de tantos en nuestra estructura financiera multilateral que ya existen y que tenemos años diciendo que hay que cambiar. Creamos uno más a la imagen y semejanza de lo que se supone debemos modificar y eso nos presenta un nuevo reto".

Para la organización prevaleció la agenda del norte global de evitar responsabilidades históricas y rendir cuentas por el sufrimiento de millones de personas en las comunidades de primera línea.

Es un fondo que depende de donaciones, es un fondo que dentro de su articulado no mencionan los derechos humanos, a pesar de que todo el fundamento del por qué se debe financiar y la urgencia del fondo de derechos humanos, es por la afectación desproporcionada de las comunidades más vulneralizadas del sur global que tienen la menor responsabilidad".

Señalamientos

El fondo tiene sus limitaciones, puesto que no es una simple transferencia de dinero de los países históricamente responsables de las emisiones. El mecanismo estará bajo el manejo del Banco Mundial a través de préstamos a las naciones que lo necesiten. A cambio, los países en desarrollo tendrán una presencia en el consejo de administración.

Algunos grupos y organizaciones se mostraron cautos y señalaron que aún quedan cuestiones por resolver, como la financiación del fondo en el futuro. En el caso de Harjeet Singh, de Climate Action Network International, enfatizó:

La ausencia de un ciclo de reposición definido plantea serias dudas sobre la sostenibilidad del fondo a largo plazo. La responsabilidad recae ahora en las naciones ricas para que cumplan sus obligaciones financieras de forma proporcional a su papel en la crisis climática”.

Martínez Blanco compartió que las donaciones realizadas para iniciar son mínimas ante el tamaño del problema.

En los primeros días el el anfitrión de la COP28,  Emiratos Árabes Unidos donó un total de 100 millones de dólares. Otros 100 millones de Alemania, al menos 51 millones de Reino Unido, 17.5 millones de Estados Unidos y 10 millones de Japón. Mientras que la  Unión Europea anunció una contribución por 246 millones de dólares. Al respecto el director de la Ruta del Clima criticó.

Con 700 millones de de este dólares donados no hacen ni el 0,5 % de los 200 o a 400 billones de dólares anuales que se ha estimado que se deben nutrir este fondo. Ya vemos países de la misma región (Latinoamérica) que manifiestan su felicidad, su aceptación a lo que ya ha pasado dentro de ese fondo y aceptar estos 700 millones como un gran logro".

Entre 2000 y 2020, las 55 economías más vulnerables al clima sufrieron pérdidas económicas de más de 500,000 millones de dólares, de acuerdo con un informe publicado con Loss and Damage Collaboration.

En el mismo periodo, más de 4,000 millones de personas han sido impactadas y más de 2.9 billones de dólares se han perdido por solo por desastres atribuibles a eventos climáticos extremos, de acuerdo con el Instituto de Recursos Mundiales (WRI, por sus siglas en inglés). 

Al respecto, la asesora de política sobre cambio climático de Amnistía Internacional, Ann Harrison, manifestó que la financiación prometida por unos pocos países está muy por debajo de la que realmente se necesita y apenas alcanza para hacer operativo el fondo, y poco más.

Añadió que no tiene comparación, "al lado de de los 7 billones de dólares en subvenciones que muchos Estados, incluidos algunos de estos donantes, conceden anualmente para apoyar al sector de los combustibles fósiles.”

Teniendo en cuenta los enormes y excesivos beneficios que las empresas de combustibles fósiles han acumulado el año pasado mientras siguen destrozando el clima, y que algunos de los Estados donantes actuales son los responsables de una gran parte de las emisiones históricas de gases de efecto invernadero, la suma inicial es decepcionantemente pequeña".

Harrison coincidió con que la ausencia de toda mención a los derechos humanos en la gestión del fondo es también muy preocupante.

Especialmente porque es probable que sea gestionado inicialmente por el Banco Mundial, que tiene, en el mejor de los casos, un historial desigual en la aplicación de salvaguardias de derechos humanos en sus operaciones”.

La organización instó al Banco Mundial a que se comprometa a hacer el fondo lo más accesible posible y a que conceda subvenciones en lugar de préstamos para evitar un mayor endeudamiento de los países en desarrollo.

Martínez Blanco compartió que la discusión que viene ahora es la de la meta global de financiamiento y la calificó como "sumamente abstracta".

No se sabe como realmente va a anclarse y nos deja una gran incertidumbre que este tiempo de incertidumbre, lastimosamente cuesta vidas y cuesta calidad de vida y viola derechos humanos de millones de personas en el Sur global y eso no es aceptable".

Al respecto de la posición de Costa Rica, el ministro de Ambiente y Energía, Franz Tattenbach Capra, celebró adopción de la operacionalización del Fondo de Pérdidas y Daños. Antes de viajar a la COP el ministro en conferencia le restó validez a cómo sería operado el fondo y quién sería el encargo, dijo que lo que les importaba es que el fondo saliera adelante.

La COP28 se celebra en Dubái entre el 30 de noviembre y el 12 de diciembre y Costa Rica envío una delegación de 27 personas al evento.

Lea: Ministro de Ambiente previo a participación de Costa Rica en la COP: "Ya no solo se trata de que nos den medallitas"