Rodrigo Chaves acusó a los periodistas de "atacar sin razón" a la ministra de Salud.

El presidente de la República, Rodrigo Chaves Robles, acusó a medios de comunicación nacionales de tener periodistas que trabajan como "sicarios políticos".

Dicho calificativo también se lo dio al trol "Piero Calandrelli", manejado por  Alberto Jesús Vargas Zúñiga, que recientemente denunció vínculos con la ministra de Salud, Joselyn Chacón Madrigal. 

Los ataques de Chaves Robles a la prensa, realizados en una conferencia donde ratificó en el puesto a Chacón Madrigal, fueron dirigidos a los periodistas de los medios de comunicación La Nación, Crhoy y Teletica:

Son sicarios políticos los periodistas de ciertos medios que se han dedicado a atacar a esta ministra (Joselyn Chacón) sin razón", señaló Chaves.

Posteriormente el presidente leyó una definición de sicario en la que indicó que "es una persona contratada por gente para acabar con otras personas" y afirmó que en la prensa costarricense hay sicarios políticos.

Semanas atrás, Vargas Zúñiga señaló al diario La Nación que la ministra Chacón le había estado pagando durante meses por producir y publicar ataques contra periodistas en redes sociales. Ese contenido se difundía en redes sociales como Facebook y TikTok e iba dirigido a quienes quienes criticaran a la jerarca en general, como diputados de oposición y otros.

En el periodo de consultas de la conferencia de prensa de este 9 de enero, a la ministra de Salud se le cuestionó que en la comunicación que tuvo con el trol, al cual le habría indicado que atacara personalmente a un periodista al que tildó de "maldito".

Ante esto, Chacón Madrigal afirmó que, para ella, el periodista de apellido Ureña "se merece esas palabras".

Yo lo que veo es una mujer que se sintió vulnerable, atacada, que quiso defenderse y que cometió un error en la manera en que lo hizo. Sí, 'arréele a esos desgraciados',  fue lo que dijo. Sí, eso fue lo que hizo", mencionó Chaves Robles sobre las acciones de su ministra.

En entrevista con el Semanario Universidad, Vargas aseguró que su primer contacto con el partido del Gobierno surgió durante la campaña presidencial del año pasado, cuando recibió una llamada telefónica de la actual diputada Pilar Cisneros Gallo, quien le pidió colaborar con la candidatura del presidente Chaves Robles.

Al ser consultada por el Semanario, Cisneros negó la relación pero, según Vargas, en abril del año pasado y tras haber ganado las elecciones, Chacón (quien fue la jefa de campaña de Chaves en las pasadas elecciones) le ofreció una “relación laboral” con promesas de pagos semanales de hasta 145 mil colones.

Adicionalmente, en el espacio de conferencia de prensa el mandatario Rodrigo Chaves acusó a los medios antes mencionados de tener una campaña en conjunto con los partidos políticos Liberación Nacional y Frente Amplio, con el objetivo de atacar a la ministra de Salud.

Ella se queda. Le tengo malas noticias a esos medios y diputados, ustedes pensaban porque lo hicieron por muchos años que quitaban y ponían presidentes o ministros, como se lo hicieron a Carlos Alvarado Quesada, con Luis Guillermo Solís y con Laura Chinchilla Miranda pero ni a eso llegan. Aquí el que decide, porque por mí votaron los costarricenses y tengo más apoyo, soy yo y ella se queda", enfatizó Chaves. 

El mandatario tildó de "escandalillo" a la polémica y afirmó que los medios de comunicación y políticos que han aludido la situación "hacen una tormenta, un huracán, un torbellino en un vaso de agua de 430 mil colones".

Ataques a la prensa

Desde la campaña como candidato presidencial Chaves Robles ha realizado ataques directos contra la prensa.

En una gira de su partido previo a la segunda ronda de las elecciones por la presidencia, el hoy presidente prometió "destrucción de las estructuras corruptas de La Nación y de Canal 7", en caso de llegar al poder.

Ya como presidente, se enfrascó con el diario La Nación y su posterior orden de no dar más permisos para actividades masivas en el Parque Viva, que es parte del Grupo Nación, generó que la orden fuese anulada por la Sala Constitucional luego de afirmar que el Poder Ejecutivo violentó libertad de prensa al ordenar cierre del centro de eventos.

Ese altercado también provocó que la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), con sede en Miami, emitiera un pronunciamiento en el que mostró su preocupación por las acciones de Chaves Robles e informó que se mantendría vigilante de la situación.