El triatleta estadounidense Chris Nikic se convirtió esta semana en la primera persona con síndrome de Down que finaliza con éxito un Campeonato Mundial Ironman. Nikic completó los 3,8 kilómetros de natación, 180 kilómetros en bicicleta y 42,195 kilómetros de maratón en 16 horas, 31 minutos y 28 segundos (mejor marca personal).

Tras la conclusión del evento, el deportista escribió en sus redes sociales:

¿Qué se necesita para que alguien con síndrome de Down haga un Mundial Ironman? Probablemente lo mismo que los demás, pero tal vez un poco de trabajo extra y una cantidad de personas apoyando. Actualmente entreno alrededor de 15-20 veces por semana durante un año"

Esta noticia llega dos años después de la hazaña que protagonizó en Florida. Recordemos que, en noviembre del 2020, el triatleta de 23 años se convirtió en la primera persona con síndrome de Down que finaliza la distancia Ironman. 

El estadounidense terminó la prueba con un tiempo de 16 horas, 46 minutos y 9 segundos. El límite para quedar descalificado estaba 13 minutos y 51 segundos más tarde, por lo que debió hacer un gran esfuerzo para no claudicar.

Según Medline, las personas que tienen Trisomía 21 presentan un desarrollo físico más lento de lo normal, al punto que se debe realizar una valoración médica de cuello y caderas para ver si el niño o niña es apto para realizar deporte.

A lo largo de su vida, Chris ha experimentado varios obstáculos, los cuales ha superado con creces. Nikic fue operado del corazón a los cinco meses de edad, aprendió a caminar a las 4 años, empezó comer alimentos sólidos a los 5 años y con 17 años, se vio sometido a cuatro operaciones en el oído. Ninguno de estos acontecimientos le impidió insertarse en el deporte.

Desde la infancia, Chris aprendió a nadar e ingresó al programa de Olimpiadas Especiales en su país. Fue precisamente ahí donde desarrolló su capacidad de nadar 1.000 metros en aguas abiertas y se motivó a probar suerte en el triatlón, gracias al apoyo de sus padres y su guía competitivo: Dan Grieb.