Este fin de semana un grupo de ciclistas alzó la voz de protesta pues denuncian que han sido víctimas de abuso de autoridad por parte de la Policía de Tránsito y la Fuerza Pública.
Tal fue el caso de Federico Delgado Alvarado, a quien la Policía de Tránsito le decomisó su bicicleta cuando circulaba en el sector de Tres Ríos. Ramón Pendones de Pedro, director ejecutivo de A Convivir, relata:
El venía de Tres Ríos por Calle Vieja y a la hora de entrar en La Florencio del Castillo lo detuvieron en la zona donde lo no pueden aplicar la prohibición de no circular en calles de 80 km/h o más, por no existir ciclovía o ruta alterna; ya que la ley de tránsito se modificó en este sentido y ahora no se puede prohibir si no existen alguna de esas dos condiciones”.
Pendones de Pedro detalla que la organización trabajó por meses en conseguir de Dirección de Ingeniería de Tránsito del MOPT el detalle de las vías de 80 kph cuya velocidad máxima está establecida en 80 kilómetros por hora (o más) para poder delimitar con claridad las excepciones. “Existe un punto "negro" entre la salida de la "oreja" que viene del túnel de Tres Ríos a incorporarse a la Florencio del Castillo, que sigue siendo de 80 k/ph o mas, no obstante, por la modificación que se se hizo a la Ley de Tránsito Nº 9078 vía Ley de Movilidad y Seguridad Ciclística Nº 9660 el 24 de enero del 2019, este punto "negro" deja de serlo por las condicionantes que se le incluyeron al artículo relacionado con la restricción a las bicicletas en rutas de 80 k/ph”.
Según Pendones de Pedro, han intentado visibilizar la situación a las autoridades, sin éxito: “Cabe señalar que nosotros le comentamos esta situación al director de la Policía de Tránsito, Germán Marín, pero alega que sus oficiales sólo detuvieron a los que venían desde Hacienda Vieja (inicio de la Florencio del Castillo) y no a los que venían de Tres Ríos, lo que es falso”.
Delfino.CR contactó al MOPT para conocer su posición oficial en torno a estos incidentes y se nos indicó que las autoridades no se refieren a casos específicos “como los que señalan los señores de estas asociaciones o grupos”. Sin embargo, sí se nos facilitaron las declaraciones generales que ofreció Germán Marín Sandí, director de Tránsito, sobre los operativos de esta fin de semana:
Con relación a los diferentes controles y retenes que hemos realizado en las principales rutas nacionales y cantonales, es importante destacar que hemos estado en las autopistas tanto en la Ruta Nacional #2 (Florencio del Castillo), como en la 27, la Próspero Fernández, la Ruta 32 y también la Ruta Nacional #1 hacia Alajuela. Es de rescatar que en esos controles se sancionaron a algunos ciclistas que irrespetaban el señalamiento de que no pueden circular ciclistas en autopistas y también como indica la Ley de Tránsito, aquellos que utilizan rutas nacionales donde la velocidad de circulación es igual o superior a los 80 kilómetros por hora. Es importante indicarles que no se expongan a accidentes de tránsito, más importante que la confección de la multa es evitar un atropello o una desgracia en nuestras carreteras”.
Otras denuncias
La situación que sobrellevó Delgado Alvarado no es la única que ha trascendido en denuncias ciudadanas en torno a este retén y los decomisos ilegales de las bicicletas. Por el contrario: han seguido sumándose. Ramón Pendones de Pedro explica:
“Desde que nos informaron del retén al inicio de la subida a Ochomogo en sentido SJO-Cartago, nos dedicamos a buscar personas afectadas por esta irregularidad y a través de nuestra página en Facebook, nos han llegado denuncias similares de al menos 3 personas más: Salvador Calderón Ávalos, Juan Pablo Zúñiga Chaves y Roy Mena Solano. De todas ellas tenemos el parte y mapas de GPS que demuestran que venían de la calle vieja de Tres Ríos cuando los detuvieron”.
Según comenta Pendones de Pedro, el domingo, a pesar de que ya habían presentado su reclamo al director de la Policía de Tránsito, la situación continuó presentándose. De ello da cuenta el testimonio de Estefanie Álvarez Arguedas:
“Mi nombre es Estefanie Álvarez Arguedas. Soy ciclista élite y el día de hoy me dirigía de Alajuela a Cartago. Subí por Tres ríos y después del túnel había un operativo. A las 8:30 a.m. varios ciclistas me indicaron que no se podía pasar. Fui a preguntar e inmediatamente los oficiales me hicieron señas de que me devolviera. Una señora que estaba sobre la calle me dijo “no suba porque están quitándoles las bicis”. Es una arbitrariedad que no me permitan trasladarme a Cartago, cuando no tengo otro camino que tomar. Un señor que iba a trabajar en su bicicleta (se notaba en su vestimenta) también fue devuelto. Detrás mío venía otro ciclista, Alejandro Patiño, quien también fue devuelto, nos quedamos en shock buscando cómo llegar pero no fue posible. Él sirve de testigo, así como Sudán Camacho Fallas quien también iba en el sector de Tres Ríos y no pudo cruzar, así como Piero Ravaglia, quien una hora después me llamó para indicarme que él si peleó con los tráficos y sí pudo pasar…”.
Pendones de Pedro dijo a Delfino.CR que al menos 37 bicicletas fueron decomisadas en estas operaciones. “Lo que normalmente decomisan en 4 meses y en muchos casos, como los anteriores, por una mala aplicación de la ley y hasta por una excesiva y desmedida represión indiscriminada sobre toda aquella persona que viajaba en bicicleta”.
La situación, además, ha implicado nuevos inconvenientes: “Ahora tenemos el problema de que los partes no han llegado y la gente no puede pagar siquiera. La página para hacer los trámites no es clara, no hay opción para el retiro de bicis (solo de motos y carros) y para colmo, están pidiendo la factura de la bicicleta”.
“Estamos de acuerdo con que la policía de tránsito le quite la bici a la gente que anda en grupo o por vías restringidas. Es lo correcto. Pero no entendemos el fundamento para decomisarle las bicicletas a personas que circulan por vías autorizadas y de manera individual”, dice Andrés Gutiérrez Montoya, ciclista aficionado y quien también contactó a Delfino.CR para evidenciar su malestar con la situación.
Quejas similares por el actuar de las autoridades en días recientes siguen aflorando, poniendo en evidencia que, dentro de la población que utiliza la bicicleta para trasladarse reina en este momento una sensación de incertidumbre, situación que pudimos confirmar no solo con Pendones de Pedro (A Convivir), sino también con Andrea San Gil León (Centro para la Sostenibilidad Urbana), Roberto Guzmán Fernández (ChepeCletas) y David Gómez Murillo (BiciBus). Precisamente este último, nos dice:
Muchos miembros de la comunidad BiciBus viajan a su trabajo en bicicleta y han manifestado su preocupación ante la situación. No hay claridad sobre si pueden usar sus rutas habituales y qué tan seguras son las rutas alternas disponibles. Algunas personas están abandonando la bici como medio de transporte por temor y volviendo al transporte público, donde el riesgo de contagio sí es significativo”.
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Por su lado, Guzmán Fernández escribió el sábado pasado lo siguiente:
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Andrea San Gil León, fundadora del Centro Para la Sostenibilidad Urbana, conversó con Delfino.CR sobre los incidentes registrados en los últimos días: “Nos han llegado reportes de personas ciclistas que están cumpliendo con las medidas sanitarias y no están rompiendo ninguna ley (incluyendo las restricciones de transitar por vías de más de 80kph) siendo hostigadas o amenazadas de diversas formas por la fuerza pública o por oficiales de tránsito, al mejor modo "que paguen justos por pecadores"”.
Según San Gil esta conducta de las autoridades es contraproducente no solo por la afectación particular, sino también en términos generales, pues más allá del contratiempo y desgaste que sufre la persona directamente afectada, el mensaje que se envía a la población es, en su criterio, muy preocupante.
“Esta situación es problemática por diversas razones. Por un lado se está desincentivando el uso de la bici para muchas personas que normalmente operamos con todas las de ley, incluso a personas que usan la bici para trabajar. ¿El resultado? Más gente entonces va a volver a usar el carro o la moto, o aún peor en contexto pandémico, a usar el transporte público, que es el segundo espacio de más riesgo de contagio. Además, se está generando una cultura de represión que valida comportamientos agresivos por parte de no solo las autoridades, si no también de la Fuerza Pública y los conductores de carros. Por último, denota una vez más el absoluto desinterés que tiene el MOPT por atender de manera efectiva la seguridad de las personas ciclistas, a pesar de que son de las más vulnerables en las calles. Llevamos más de un mes sentándonos con ellos para tratar hacer ciclovías temporales como muchos otros países del mundo, y solo excusas y atrasos. Pero para castigar, intimidar y decomisar bicis (hasta a quienes no están haciendo nada mal) no pierden ni un segundo”.
Actualmente la Organización Mundial de la Salud recomienda la bicicleta como un medio de transporte seguro y óptimo para lograr el distanciamiento social en durante la pandemia. “El Ministerio de Salud, el MOPT y la Fuerza Pública deberían más bien garantizar que no se se desincentive el uso de la bicicleta dentro de las regulaciones estipuladas por temor a represalias producto de la desinformación y el abuso de autoridad”, concluye San Gil León.