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— El Centro de Investigación y Estudios Políticos de la UCR (CIEP) presentó el día de ayer los resultados del más reciente Estudio de Opinión Sociopolítica realizado a finales de agosto y que muestra como principal hallazgo el —por todos percibido— malestar de la ciudadanía con el Gobierno.
— La encuesta, que fue realizada con una muestra aleatoria vía teléfonos móviles a personas mayores de edad, cuenta con un margen de error de ±3,1 para un grado de confianza del 95%, o sea, hay una certeza estadística suficiente de que los resultados de la encuesta son una representación de la ciudadanía.
Dato D+: En una encuesta el margen de error representa el rango de valores que podrían tener los resultados porcentuales obtenidos, mientras que el grado de confianza señala la probabilidad que tiene la muestra de representar a la población estudiada.
— La encuesta es categórica:“el pesimismo generalizado de la población es la regla en estos tiempos”. No es para menos: el 76% de los encuestados consideran que el país transita actualmente por el camino equivocado y un 24% se encuentra con un alto nivel de descontento, mientras que el 71% tiene un nivel de descontento medio, y solo un 5% tiene un descontento que puede ser calificado como bajo…
Dato D+: La encuesta mide el descontento en una escala de 0 a 100 donde una puntuación menor a 33 es calificado como “descontento bajo”, una calificación entre 33 y 66 es “descontento medio” y una calificación superior a 66 es un “descontento alto”.
— Al entrar en las dimensiones del descontento, la encuesta muestra que en los últimos tres años el malestar por la situación económica del país ha aumentado en 20 puntos porcentuales, pero, por lo menos la situación no es trágica ya que, según señala el informe, “el malestar de la ciudadanía no se ha traducido, al menos por ahora, en un peligro para la institucionalidad de la democracia representativa”. Esto en tanto el descontento de la ciudadanía hacía la democracia representativa disminuyó en el mismo periodo, aunque todavía ronda la mitad de la población.
— Cuando se consultó a los encuestados por los principales problemas del país, señalaron 1. El desempleo (34%), 2. El costo de la vida y la situación económica (18%) y 3. La mala gestión del Gobierno (11%).
— Ante esa percepción no es de extrañar que el 68% de la población considere que el rumbo del país es malo o muy malo y que el 79% califique negativamente la situación económica. La calificación del Gobierno de Carlos Alvarado Quesada pasó de 23% de valoraciones positivas —con 52% de las valoraciones negativas— en abril pasado a solo un 19% de valoraciones positivas —con 65% de las valoraciones negativas— en esta ocasión. La calificación que se le da al propio presidente Alvarado cayó de un —ya de por sí bajo— 5 a un 3,9 (en una escala de 0 a 10).
— Por su parte, para las instituciones del país los resultados tampoco fueron favorable solo la Iglesia Católica —con todo y el drama del sacerdote Mauricio Víquez Lizano de por medio— logró mejorar su calificación (5,8) con respecto a la pasada encuesta del CIEP de marzo de este año (cuando obtuvo 5,5), mientras que solo las iglesias no católicas mantuvieron su puntuación estable (5.4). Todas las demás instituciones por las que se preguntó perdieron entre 0.1 y 0.9 puntos (en una escala de 0 a 10). La caída más grande fue para la Asamblea Legislativa, que pasó de 4.8 en marzo a 3.9 en esta ocasión. Taco a taco con el presidente.
— Ante tal descontento social, la encuesta indagó también el respaldo de la población a ideas vinculadas con el apoyo a la democracia, la tolerancia política —entiéndase aceptar la participación en espacios de elección de quienes piensan diferente— y al imaginario de Costa Rica como una comunidad de libertades políticas, pacífica y defensora de la naturaleza (lo que la encuesta se denomina "mitos fundacionales").
— En estos aspectos se encontró que todavía el malestar no se ha transformado en desesperanza y pensamientos antisistema, ya que aún en las poblaciones con alto descontento se encuentran personas con alto grado de apego al tanto al apoyo a la democracia y a la tolerancia política como a los tres "mitos fundacionales" consultados en la encuesta.
— En resumen, los resultados deben ser un llamado de atención para este Gobierno, al que todavía le falta darle atisbos de esperanza a la ciudadanía en los temas medulares, ya que claramente su trapo de dominguear —aprobar la reforma fiscal— no ha sido suficiente para devolver la confianza a los mercados ni los consumidores y sin esa confianza será imposible enderezar la marcha.
— A pesar de las bajas calificaciones, el presidente no se despeinó por los resultados de la encuesta, y añadió: "Mi gran preocupación es cambiar cosas y desatar nudos que impiden el desarrollo de Costa Rica, cueste lo que cueste. Y si tengo que generar rechazos, entiendo que es mi tarea. El cambio no es popular", por lo que pareciera que por lo menos Alvarado sí tiene seguridad en lo que está haciendo, por más solo que se encuentra en esa percepción.
— Además, el Gobierno nombró el día de ayer a Silvia Lara Povedano, como viceministra de la Presidencia encargada de apoyar la agenda de crecimiento, empleo e inclusión… por lo que se suma a Andre Garnier Kruse, ministro de Enlace con el Sector Económico, Agustin Castro Solano, viceministro de coordinación con el Sector Privado —sí, ese puesto existe desde el mes pasado y sí, lo crearon para Castro— y María del Pilar Garrido Gonzalo, ministra de Mideplan y coordinadora del Equipo Económico del Gobierno como los "encargados" de la reactivación económica… O sea, la falta de ideas no es por falta de personas, ¿será sea más bien que sobra gente?
— En fín, no se puede dejar de señalar que en días recientes, posteriores a la aplicación de la encuesta, el Gobierno ha tratado, por donde puede, de recuperar terreno. La semana pasada presentó la Estrategia Nacional de Crecimiento, Empleo y Bienestar, mientras desde el Ministerio de Hacienda se anunció que este año han logrado reducir la brecha entre ingresos y gastos del Gobierno al punto más bajo de la última década. Esperemos que la estrategia le dé coherencia a las acciones del Gobierno, ya que la confianza requiere acciones constantes y coordinadas en el tiempo y no actos esporádicos.
Bonus Track: En el infográfico de esta semana la Estrategia Nacional de Crecimiento, Empleo y Bienestar. (Contenido D+)
Hidden Track: En Teclado Abierto, Pablo Céspedes escribe sobre la Estrategia Nacional de Crecimiento, Empleo y Bienestar: “Estrategia que se queda corta”