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— La Comisión de Nombramientos de la Asamblea Legislativa recibió un jalón de orejas de las Naciones Unidas. En misiva enviada a Elayne White Gómez (representante de Costa Rica en Naciones Unidas, Ginebra), Beatriz Balbin (jefa de la Subdivisión de los Procedimientos Especiales de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos), hace llegar un documento firmado por Diego García-Sayán (relator especial sobre la independencia de los magistrados y abogados) en el que se indica que:
Quisiera señalar a la atención urgente del Gobierno de Su Excelencia la información que he recibido sobre el proceso en marcha de selección y designación de las Altas Magistraturas Judiciales de Costa Rica, el cual podría no ajustarse a los estándares internacionales sobre la independencia judicial.
— En concreto, García-Sayán señala que a pesar de los esfuerzos que ha hecho el país para proteger la independencia judicial “el cabildeo de los candidatos con los diputados parece continuar” lo que ha dado pie a 1) nombramientos irregulares que terminan con denuncias e investigaciones (incluyendo el despido de un magistrado) 2) la elección de magistrados no incluidos en las ternas propuestas por el Poder Judicial ni planteadas en el proceso de preselección (aló, Sala Constitucional).
— El autor también rescata los elementos denunciados por el informe final del Panel Independiente para la elección de magistrados y magistradas de la Sala Constitucional y la Sala Tercera, que, tras analizar el proceso de selección de las altas magistraturas identificó varios puntos preocupantes: 1) Ausencia de un procedimiento uniforme, objetivo y mesurable para la calificación de los candidatos, 2) Ausencia de un perfil laboral o profesional adecuado, 3) Ausencia de una metodología adecuada para las entrevistas de las personas candidatas, 4) Ausencia de criterios para la solicitud de información destinada a conocer y verificar el perfil ético, 5) Inadecuada motivación, argumentación y justificación sobre la decisión que individualiza la selección final.
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— García-Sayán posteriormente procede a recordar al país los alcances del principio de independencia judicial (artículo 14 del Pacto internacional de Derechos Civiles y Políticos) así como los alcances de los estándares internacionales (avalados por Costa Rica) en lo que refiere a los perfiles idóneos para las personas que ocupan los cargos en cuestión y los procedimientos de selección para nombrarles.
— Asimismo alude al informe que presentó sobre el tema al Consejo de Derechos Humanos de la ONU, lo que deja en evidencia la testarudez del país a la hora de atender esta problemática que ha sido denunciadas infinitas veces por la ciudadanía, los académicos, los juristas y la prensa.
— El relator finaliza su carta con una amable solicitud: "En el marco del espíritu de cooperación y diálogo y en consonancia con el mandato que me ha confiado el Consejo de Derechos Humanos, quisiera invitarles a también a que consideren las siguientes recomendaciones:
- Adoptar y aplicar las medidas necesarias para garantizar que el proceso de selección y nombramiento de las altas magistraturas esté basado exclusivamente en criterios objetivos y transparentes y que tengan por objetivo asegurar la integridad, idoneidad y la formación o calificación idónea de las personas seleccionadas. Dicho proceso ha de adecuarse a los estándares y principios internacionales de la independencia judicial.
- Las decisiones relativas a la selección deben basarse en el mérito y tener en cuenta las calificaciones, aptitudes y capacidades de los candidatos, así como su integridad, independencia e imparcialidad.
- Establecer de una manera clara y detallada todo el proceso de selección de altas magistraturas. Dicho proceso ha de asegurar los criterios señalados en los párrafos anteriores, así como el cumplimiento del principio de no-discriminación, en particular al género y la diversidad étnica.
- La convocatoria deberá de recibir la publicidad necesaria para llegar a conocimiento de todas las personas interesadas. El proceso ha de ser público y transparente —con la posibilidad de realizar audiencias públicas— y contar con la participación de la magistratura y sus asociaciones profesionales, así como todos los otros actores relevantes de la sociedad costarricense.
- Asegurar que la selección y nombramiento de las altas magistraturas no se vea afectada por motivos indebidos, tales como intereses políticos, económicos o de otra naturaleza que puedan desvirtuar un proceso objetivo y transparente de selección y nombramiento. Las reuniones privadas de miembros del Poder Legislativo con los candidatos y candidatas deberán de ser debidamente reguladas para que no afecten a los estándares y principios internacionales de la independencia judicial.
- La selección final y nombramiento de las altas magistraturas deberá de ser motivada, argumentada y justificada".
— Por último García-Sayán indica que expresará públicamente sus preocupaciones ya que considera que la información que ha recibido es fiable y por ende el tema requiere una atención inmediata.
— Ahora bien, desde un punto de vista jurídico es menester recordar que todos los tratados que firma un país tienen un órgano de supervisión y diversos mecanismos para vigilar su cumplimiento. En este caso hay que tener presente que Costa Rica pertenece al Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos que garantiza la independencia judicial, de modo tal este pronunciamiento que hace el relator de independencia judicial de la ONU (en su condición de mecanismo de vigilancia del pacto) comprende un fuertísimo llamado de atención al país.
— ¿Qué señala en resumen? Que la independencia judicial se está vulnerando en la selección de las magistraturas. ¿Qué implica? Que un organismo internacional de derechos humanos le está llamando la atención al país. ¿Puede hacerlo? Sí, precisamente porque forma parte de su mandato al pertenecer Costa Rica al aludido acuerdo internacional. Aclaramos esto antes de que empiecen las fake news de “injerencia internacional en asuntos internos”, etc.
— En fin, que no es tema nuevo, pero como dejamos que se nos quemara el pan en el horno ya suenan las alarmas hasta en las más altas esferas. ¿Será que finalmente reaccionamos?
