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— La crisis en JAPDEVA y el caso de las decenas de estudiantes afectados por la carrera de Marina Civil de la sede de la UCR en la sede del Caribe, son dos de los temas que tienen al país entero con la vista puesta en Limón desde hace meses.

— Así, a pesar de que el fin de semana pasada se aprobó un crédito de $55,08 millones con el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) para ejecutar el “Programa de Alcantarillado y Control de Inundaciones para Limón que permitirá poner en marcha un proyecto de saneamiento de aguas residuales a cargo del AyA, y otro de control de inundaciones que estará en manos del SENARA —y que es un plan que por supuesto aplaudimos— en Limón la problemática generalizada continúa y las buenas noticias no bastan para desconocer esta realidad. Justo dos días después del feliz anuncio, dos temas pendientes salieron a la luz, otra vez, en la Comisión del Caribe del Congreso.

— El primero de ellos alude, una vez más, a JAPDEVA. Ayer trascendió que los diputados de la Comisión Especial de Limón aprobaron una moción para que la expresidenta de la institución portuaria, Ann McKinley Meza, comparezca ante ese foro en los próximos días, a fin de que explique la decisión que tomó de comprar dos grúas pórticas para el muelle nacional y que tuvieron un costo de 15 mil millones de colones. La polémica en torno a esa compra ya se las hemos explicado antes, pero en resumen los fondos que se utilizaron estaban destinados originalmente, desde la administración de Laura Chinchilla Miranda, para ser utilizados en la liquidación de 900 trabajadores que, tras la entrada en operación de APM Terminals, ya no son necesarios. El problema es que como esos fondos ya se consumieron, ahora no hay con qué liquidar y el Gobierno está sudando frío para ver cómo consigue los recursos para poder reducir la planilla y ver si empieza por ahí, el camino hacia la luz en el túnel de la crisis de Junta.

— Este lunes, además, la contralora Marta Acosta Zúñiga le señaló a los diputados de dicha comisión, que JAPDEVA sí sabía cuál iba a ser el impacto que tendría en sus finanzas la entrada en funcionamiento de la Terminal de Contenedores de APM pero que, sin embargo, la dirección omitió tomar acciones al respecto. ¿Un ejemplo de ello? El fideicomiso de varios miles de dólares que APM le está pagando a la Junta desde el año pasado y que todavía no tiene proyectos para gastarse (como si en Limón no hubiesen necesidades de sobra...).

— Volviendo al tema de las grúas, Acosta además le aseguró a los legisladores que la Contraloría ya había advertido a JAPDEVA que tenía que ratificar si esa compra era realmente viable y que por eso en el pasado pidió que se hicieran los estudios de factibilidad necesarios. Será a McKinle a la que le toque contestar, cuando comparezca ante la comisión, si esos estudios se realizaron o no, pero lo cierto es que si se hubiesen hecho, hubiese sido difícil no predecir que cuando APM entrara en funcionamiento, JAPDEVA perdería el 60% de su carga —como efectivamente sucedió— y que ese sería el detonante principal de la crisis tan aguda que la institución afronta ahora, que tiene dos grúas carísimas que no se utilizan porque no hay carga suficiente y 900 empleados de más a los que no hay cómo liquidar porque la plata que se tenía destinada para ello se usó en las grúas.

— Pero bueno. La cosa es que el tema con Limón no termina aquí. El segundo caso que le tocó tratar a la Comisión del Caribe, también esta semana, fue el de la carrera de Marina Civil de la UCR. Por eso este lunes se aprobó el informe especial sobre el tema, que "pide sanciones administrativas a las autoridades de la UCR" por todo el cúmulo de errores referentes a esta infructuosa carrera. Así consta en un comunicado de prensa que nos hizo llegar la Comisión a Delfino.cr.

— Para quienes no lo recuerden muy bien, la carrera de Marina Civil tiene sudando frío a las autoridades de la UCR desde a el año pasado pues, como nos comentaba una de sus estudiantes, Fressi Bustos en diciembre, cuando les empezamos a informar sobre el tema, "la carrera inició sin convenios ni internacionales, ni con navieras posibles futuras contratadoras" y por eso hoy hay decenas de estudiantes con la carrera culminada que no se pueden graduar porque la UCR no está acreditada como centro de enseñanza de marinos ante el mundo y el MOPT tampoco lo está como empleador, a pesar de que ya hay convenios aprobados por la Asamblea Legislativa para ello, pero no han empezado su ejecución. Marina Civil es una carrera que se ejerce a mar abierto, en aguas internacionales, y por eso es que tenemos a más de 100 estudiantes a la deriva y ya varias denuncias ante el Tribunal Contencioso Administrativo al respecto.

— Así, esta semana la Comisión del Caribe emitió criterio al respecto y su informe fue dictaminado afirmativamente este lunes, pidiendo que "las autoridades universitarias ordenen la investigación interna y activen los procedimientos disciplinarios respectivos" y que se inste "a la Auditoría Interna y a la Contraloría Universitaria para que se analicen las posibles consecuencias legales a nivel institucional". Lo que se busca es evaluar el daño moral que implicó para los estudiantes este lío en que los tienen metidos y, además, determinar si hubo o no mal uso de recursos públicos pues en la carrera ya se han gastado más de 7 mil millones de colones cuyos resultados parecen inexistentes.

— Por ello es que el informe cierra con la orden de "enviar copia del presente informe al Ministerio Público, así como a la Procuraduría de la Ética, a fin de que sean dichas Instituciones las que de acuerdo a sus competencias, puedan indicar si existe responsabilidad penal por parte de las autoridades de la Universidad de Costa Rica".

— Esta semana conversamos con Ariel Castillo, uno de los 150 estudiantes de la carrera que siguen frenados con el asunto, y él nos comentó que, a la fecha, la universidad sigue sin darles una solución verdadera. Se les ha prometido enviarlos a terminar la carrera a Panamá para que puedan graduarse y tratar de ejercer en un país que sí esté reconocido (como Perú o el propio Panamá) mas sin embargo a la fecha, esto no ha pasado de eso mismo: promesas.

Esta nota es parte del Reporte: De Japdeva, Marina Civil, la Iglesia La Luz del Mundo y las Chava-ocurrencias