Cría fama y échate a dormir. El PAC habló misa a diestra y siniestra de la ética y, una vez que le tocó enfrentar a los toros dentro del redondel y no desde la barrera no hizo otra cosa más que acumular cualquier cantidad de cuestionamientos en torno al manejo de los recursos públicos y la toma de decisiones más que comprometedoras desde el ejercicio del poder.

Mi ejemplo “favorito” es uno que ilustro con especial insistencia cada vez que me hablan de la buena lid de la administración Solís Rivera en el manejo de El Cementazo. Por ley, cada nuevo Gobierno nombra 3 o 4 directores para la junta directiva del BCR de acuerdo al turno que le toque. Es decir, Óscar Arias nombró 4, Laura Chinchilla nombró 3, a Luis Guillermo Solís le tocaban 4, etc. Y digo etc porque luego de El Cementazo todo se fue al traste: Solís nombró a los 7 que quiso tras la torta (#BorrónYCuentaNueva) y luego llegó Alvarado y quitó y dejó a placer, etc. A nadie parece importarle todo este asunto. Sea como sea el 100%...