Sector señaló que Walmart continuará recurriendo a importaciones en lugar de priorizar la compra a agricultores locales.

Las diferentes asociaciones de agricultores que conforman el sector cebollero alertaron hoy que, tras reuniones con Walmart Costa Rica, la principal cadena de supermercados del país, confirmaron la decisión de continuar recurriendo a importaciones en lugar de priorizar la compra a agricultores locales.

Esto ocurre luego de que, a inicios del mes de setiembre, la Asociación de Horticultores del Irazú (ASHORI) denunció a la Corporación de Supermercados Unidos S.R.L. por el presunto mal etiquetado de cebollas en sus supermercados.

Según la organización, en distintos establecimientos se comercializan mallas de cebolla que en el frente de la etiqueta se identifican como producto costarricense, pero en el reverso se indica que son importadas de Perú.

César Gómez, representante legal del sector y productor de cebolla, dijo:

Estamos ante un conflicto real y abierto: los productores nacionales tenemos la capacidad de ofrecer calidad, calibre y abastecimiento continuo, pero no se nos da la oportunidad de vender directamente. Se compra a intermediarios y no al agricultor costarricense”.

Frente a este panorama, los agricultores propusieron a la cadena de supermercados establecer contratos directos entre cadenas y productores organizados, garantizar precios justos que den sostenibilidad a la actividad, aplicar de forma estricta la norma técnica que obliga a un etiquetado claro y transparente para el consumidor. Además de promover campañas de consumo nacional que reconozcan la calidad de la cebolla costarricense.

El sector se compromete a mantener un nivel de servicio superior al 95%, invertir en tecnología de secado, riego y clasificación, y garantizar un producto homogéneo que cumpla con los más altos estándares de calidad.

Dato D+: El pronunciamiento emitido cuenta con el respaldo de la Corporación Hortícola Nacional, la Asociación de Horticultores del Irazú (ASHORI), Coopehorti Irazú RL, la Asociación Cámara de Agricultores (ASOCAGRI), el Centro Agrícola Cantonal de Santa Ana y agricultores independientes de Zarcero.

Incumplimiento de reglamento por parte de supermercados

Uno de los aspectos más preocupantes es el incumplimiento del Reglamento Técnico RTCR 489:2018, vigente desde 2020, que establece la obligación de clasificar la cebolla por calidad, calibre, origen y fecha de vencimiento, destacaron los cebolleros.

Si bien la cadena cadena reconoció fallas en el etiquetado, sus correcciones ante la Oficina de Defensa del Consumidor fueron parciales, afirmaron los agricultores. En esa respuesta indicaron que se incluyó el país de origen y el precio, pero se omitió información clave como el calibre, la clasificación de calidad y la fecha de caducidad.

Al respecto Gómez mencionó:

El calibre, la clasificación y la caducidad no son tecnicismos: definen el precio, la frescura y el uso del producto. Ocultar esa información priva al consumidor de decidir con transparencia”.

Los cebolleros indicaron que el incumplimiento normativo y la fuerte presencia de importaciones (la cadena es el principal importador de cebolla) tienen un fuerte impacto en toda la cadena productiva. Ejemplificaron:

Al agricultor se le paga entre ₡250 y ₡400 por kilo en finca, mientras que el consumidor paga hasta ₡1.500 en góndola".

Para el sector, la brecha de precios refleja que el problema no está en el campo, sino en la cadena de distribución. "Si esta situación persiste, la zona norte de Cartago podría dejar de ser una tierra agrícola, desplazando a miles de familias campesinas", alertaron.

Además, los productores recordaron que ya se han presentado denuncias en sede penal contra importadores por prácticas irregulares de subfacturación y etiquetado incompleto, y que el sector cebollero participa en esos procesos como parte interesada y víctima ofendida.

Llamados

El sector cebollero hace un llamado a las cadenas comerciales a respetar y aplicar la norma técnica, etiquetar correctamente y dar espacio a la producción nacional.

Al Gobierno le solicita fiscalizar de manera efectiva las importaciones, garantizar que las reglas se apliquen a todos por igual y dar seguimiento a las denuncias ya presentadas en sede penal.

Mientras que llaman a los consumidores a exigir transparencia en el etiquetado y preferir la cebolla nacional, fruto del esfuerzo de miles de familias agricultoras.

"Los consumidores tienen derecho a saber qué compran. No más etiquetas a medias: el país necesita transparencia, cumplimiento de la normativa y un compromiso real con la agricultura nacional", finalizaron.