El desfile cerró la 27ª edición del Festival Flores de la Diáspora Africana con homenajes, gastronomía caribeña y un recorrido por el centro de la capital.
Este sábado 6 de setiembre, miles de personas se congregaron en el centro de San José para disfrutar del San José Diaspora Parade, evento de clausura de la 27ª edición del Festival Flores de la Diáspora Africana.
La jornada comenzó a las 9:00 a.m. con un homenaje a dos figuras clave de la cultura afrocostarricense: Tipi Royes, cantante de Marfil con más de 50 años de trayectoria, y Geovanny Loaiza, quien ha dedicado más de 25 años a rescatar y difundir el folclore afrodescendiente.
El desfile arrancó a las 10:00 a.m. y se extendió hasta las 3:30 p.m., recorriendo el trayecto entre el Parque Morazán y el Parque Nacional. Participaron 39 bandas acompañadas de agrupaciones artísticas, poesía y bailes al ritmo de calypso, reggae y soca. Los trajes y la energía de los participantes transformaron las calles de San José en una fiesta de diversidad y orgullo cultural.
De forma paralela, la Feria Multicultural de Emprendedores reunió más de 150 iniciativas locales con productos de moda, hogar, cuidado personal y gastronomía, mientras que la Feria Gastronómica Afrocaribeña y de la Diáspora ofreció más de 20 puestos con platillos tradicionales como rice and beans, paty, plantintá y agua de sapo.
Las actividades culminaron en el Parque Nacional con presentaciones de Johnnyman (Mekatelyu), Kenneth Mayorga, Banda Dinamo Limón y Masterkey. El cierre estuvo a cargo del Grupo Marfil, que reunió a miles de asistentes en un concierto cargado de tradición y música caribeña.
“Queremos agradecer profundamente a todas las personas que se unieron a esta celebración y a quienes hicieron posible esta edición del festival. El San José Diaspora Parade nos recuerda la importancia de celebrar, honrar y respetar la cultura afrocostarricense, no solo durante un mes, sino todos los días del año”, expresó Carol Britton, directora de la Fundación Arte y Cultura para el Desarrollo.
El festival contó con el apoyo de la Unión Europea, la Municipalidad de San José y diversas instituciones, consolidándose nuevamente como uno de los espacios más representativos para visibilizar y homenajear la cultura afrocostarricense en Costa Rica.