En el marco del proceso de implementación de la Estrategia Nacional REDD+, en el año 2020 Costa Rica firmó un acuerdo de compra para la reducción de emisiones de carbono CO2e (ERPA) con el Fondo Carbono.
Este acuerdo, estableció que se podrán vender hasta por 12 millones de toneladas de carbono, generadas durante el período 2018-2024. Estas reducciones de emisiones se dividen en tres eventos de monitoreo. El primer evento reconoce las reducciones del año 2018-2019, el segundo 2020-2021 y el tercero las reducciones de emisiones del año 2022-2023-2024.
Franz Tattenbach, Ministro de Ambiente y Energía comentó:
Me complace resaltar que esta es la primera transacción de créditos de carbono emitidos bajo el marco metodológico del FCPF (Cooperativa de Carbono Forestal del Banco Mundial) que un país realiza en el mercado voluntario de carbono forestal. Este reconocimiento premia los esfuerzos de Costa Rica en la reducción de emisiones forestales y permite obtener mejores precios para los créditos de carbono. Con estos fondos adicionales, se fortalecerá el Programa de Pago por Servicios Ambientales y se ampliarán las capacidades operativas del SINAC."
Dentro de este acuerdo, también se contempló la opción de que el Gobierno, tuviera la posibilidad de vender excesos de reducciones de emisiones por encima de los 12 millones de toneladas que están bajo el ERPA.
Es decir, que, si en un evento se produjo más del promedio establecido de entrega, se podrían ofertar para que el Banco Mundial las adquiriera como adicionales al período de reporte. Para el segundo evento de monitoreo (2020-2021) presentado por Costa Rica, el Fondo Carbono le dio la opción al país de vender los excedentes del carbono por la reducción de emisiones, (100.000 toneladas), bajo un mecanismo de “subasta”.
Esta oportunidad fue aceptada por el país, y ante esto algunos compradores privados solicitaron a Costa Rica considerar la opción de vender directamente las reducciones de emisiones a los clientes potenciales.
Por esta razón, desde octubre 2024, Costa Rica trabajó en recopilar información sobre los procesos y requisitos para cumplir con los acuerdos que le permitieran al país ofrecer las reducciones de emisiones del Fondo de carbono a organismos privados y de esta forma mejorar los ingresos por tonelada en comparación con el monto ofrecido bajo el contrato con el Fondo de Carbono.
Además, en esta venta del excedente de reducción de emisiones, el país estableció como parte de la negociación, que el comprador de las reducciones de emisiones de Costa Rica deberá demostrar integridad ambiental de acuerdo con las normas del Banco Mundial y la integridad ambiental establecida por la iniciativa LEAF.
Asimismo, bajo los términos de esta negociación, se debe cumplir con lo solicitado por las partes interesadas nacionales como lo son los territorios indígenas. En este sentido, Costa Rica ofertó un precio que fue aceptado por Emergent Forest Finance Accelerator Inc., logrando así concretar la venta de las 100.000 toneladas bajo un número de registro oficial que garantiza la trazabilidad de las reducciones de emisiones.
Al igual que con la venta de reducción de emisiones realizada con el Fondo de Carbono, esta venta también se realiza bajo el cumplimiento del plan de distribución de los beneficios de acuerdo con lo establecido con el Fondo de Carbono.
