La lucha contra la pobreza y la vulnerabilidad se deben de abordar desde la justicia social y no violentando los Derechos Humanos de las personas", señala la organización de la sociedad civil que trabaja en asentamientos precarios, TECHO, a través de un comunicado donde reprueba el desalojo de más de 800 familias en La Carpio.
El pasado 9 de marzo, la Fuerza Pública y la Policía Municipal de San José llegaron al sitio con el objetivo de desplazar a las personas que durante los últimos 15 días, levantaron ranchos y carpas en una propiedad privada de unos 47 mil metros cuadrados con la intención de establecerse ahí. El suceso escaló a violencia entre y terminó en enfrentamientos de las autoridades con habitantes de la zona.
En TECHO critican:
Costa Rica, como un país que respeta los acuerdos internacionales que protegen la integridad de todos y todas, está demostrando a través de estas acciones, una falta de soluciones a largo plazo adecuadas para la situación que miles de familias viven en los asentamientos populares, vulnerando aún más a los individuos e incrementando la brecha social que nuestro país sufre".
En la organización hacen énfasis en reconocer el derecho que tienen todas las personas de acceder a la tierra, a la vivienda digna, a los servicios básicos, la educación, la salud y empleo que permitan que las personas puedan desarrollarse con la mayor plenitud posible.
Instamos a las autoridades correspondientes a trabajar en conjunto con los diversos actores de la sociedad para desarrollar y establecer soluciones permanentes y sostenibles, con el fin de garantizar la seguridad y bienestar de las familias en situación de vulnerabilidad".