El desajolo de un terreno baldío en La Carpio, en La Uruca, terminó la mañana de este miércoles en un enfrentamiento entre la Fuerza Pública, la Policía Municipal de San José y varios habitantes de la ciudadela.

El incidente terminó con lanzamiento de gases lacrimógenos, en medio del lanzamiento de piedras por parte de un grupo cercano a la zona.

La acción policial empezó a eso de las 9 de la mañana, con el objetivo de desplazar a unas 200 familias que, durante los últimos 15 días, habían levantado ranchos o carpas en una propiedad privada de unos 47 mil metros cuadrados, contigua al relleno sanitario, con la intención de establecerse ahí.

Según señaló el director general de la Fuerza Pública, el comisario Daniel Calderón Rodríguez, los hechos empezaron sin ningún conflicto pues las personas que estaban en la propiedad desalojada salieron sin oponer resistencia. Eventualmente algunos integrantes del grupo en empezaron a agredir a los oficiales:

Todo, hasta cierto momento, había transcurrido con tranquilidad: la mayor parte de las personas que estaban desalojando la propiedad salieron pacíficamente; sin embargo, acá en este punto cuando las personas ya estaban saliendo, varios grupos empezaron a lanzar objetos contra la policía, empezaron a quemar colchones, hubo una agresión directa contra los oficiales y una situación que se prolongó por varios minutos. Ya en este momento se logró controlar pero sí siguen algunos grupos dentro de las alamedas lanzando cosas contra la policía y tratando de generar caos y violencia".

Según agregó Calderón, el grupo violento lanzó objetos y piedras contra la policía, con el saldo de dos oficiales heridos que en este momento están en observación médica:

Los objetos que han lanzado podrían haber tenido consecuencias fatales, no solamente contra los policías, sino también contra particulares que se encontraban por la zona transitando, contra los autobuses y contra los vecinos de la zona".

En este momento la situación ya está controlada y la maquinaría ya entró al terreno a finalizar el desalojo y a quitar los ranchos instalados.

Ahora, y según Calderón, el objetivo es "evitar que estos hechos de violencia afecten a la población que vive acá" pues:

Insisto, la mayor parte de la gente salió pacíficamente y probablemente la que reaccionó así sea gente que no tiene nada que ver con el desalojo y que está aprovechando esto para generar caos y violencia".