Por Ximena Marin Chan – Estudiante de la carrera de Ingeniería Informática
Los recientes avances tecnológicos han dado paso a una gran variedad tanto de dispositivos como de tecnologías, técnicas o lenguajes de desarrollo. Cada dispositivo se diferencia de otros en el uso que le hayan dado sus usuarios. Algunos enfocan sus ventajas en la portabilidad, este es el caso de los dispositivos móviles, los cuales suelen ser llevados a todas partes, permitiéndole a su portador acceder a aplicaciones que le ofrecen una gran cantidad de funcionalidades. Por otro lado, las computadoras suelen enfocarse en brindar más detalles y opciones a sus usuarios. La popularidad que han adquirido los dispositivos móviles ha convertido el desarrollo de aplicaciones móviles en un área muy importante del mundo del desarrollo de software. Dicho esto, ¿cuáles con son factores y elementos por tomar en cuenta a la hora de desarrollar una aplicación móvil?
Tener en cuenta en público objetivo es siempre de gran importancia a la hora de lanzar un producto o servicio, una aplicación móvil no es excepción. Se debe tener muy claro el tipo de usuario al que estará dirigida la aplicación. Una vez que se conozca al usuario se podrán agregar o modificar ciertas funciones con el objetivo de cumplir de mejor manera las expectativas del usuario, claro está que también pueden realizarse futuras mejoras mediante actualizaciones y feedback de los mismos usuarios. Por otro lado, tenemos las tecnologías disponibles para el desarrollo de la aplicación. Capeáns (2017) nos indica que debemos pensar en el lenguaje en que se desarrollará, el diseño, el flujo de las pantallas y en qué plataformas estará disponible. En el caso de este último, la más común es el sistema operativo Android, seguido de IOS como la segunda más común. Por esta razón, se deberá analizar si es factible lanzar la aplicación para todas las plataformas o solo para algunas.
El diseño de la aplicación suele ser una fuente de potenciales problemas (Goldring, 2017). Primeramente, tenemos el flujo de navegación de las diversas pantallas que incluirá la aplicación, esto debido a que los usuarios ven una navegación intuitiva y sencilla como un requisito a la hora de seleccionar una aplicación. La variedad de resoluciones que presentan los dispositivos móviles es también un punto a tomar en cuenta en el diseño, las interfaces de la aplicación se deben ajustar a la pantalla de cualquier dispositivo sin comprometer las funcionalidades ni el acceso a los diferentes botones que la interfaz pueda presentar; sin mencionar la problemática que presenta en general el área de desarrollo de software, en el que las tecnologías avanzan constantemente, llegando a marcar a ciertas otras tecnologías como obsoletas. Por esta razón, se debe escoger estratégicamente qué tecnologías utilizar a la hora de desarrollar la aplicación.
En resumen, al desarrollar una aplicación móvil se deben tomar en cuenta diversos factores y problemáticas. Primeramente, se debe realizar un estudio de mercado para determinar la factibilidad y cantidad de público meta interesado en utilizar la aplicación. Una vez determinado esto, y habiendo entrado en la fase de desarrollo, se deben seguir los estándares de flujo de navegación que han surgido a través de los años, además de poder ajustarse sin problemas a las diversas dimensiones de los dispositivos móviles presentes o por salir en el mercado. De no darles importancia a los factores antes mencionados se podría ahuyentar a los usuarios y de esta forma arriesgar un fracaso.
