Este lunes 24 de mayo se tenía prevista en Corte Plena la exposición Independencia Judicial: La elección de magistradas y magistrados en Costa Rica a cargo de Diego García-Sayán, relator de las Naciones Unidas.

García-Sayán, quien fuera juez de la Corte Interamericana de Derechos Humanos por dos períodos consecutivos (2008-2013) ya ha presentado dos informes muy críticos sobre el proceso de elección de magistraturas en Costa Rica, por lo que la conferencia había generado su buena cuota de polémica dentro de la la Corte desde días atrás.

En efecto, la exposición no llegó a concretarse, por dos motivos específicos, uno de forma y otro de fondo. De forma, en tanto la intervención del relator estaba prevista para tardar entre 30 y 45 minutos, a partir de las 9 de la mañana, y la Corte tardó dos horas discutiendo si la permitía o no, razón por la cual Naciones Unidas tuvo que comunicar que el relator no podría ofrecer la charla visto que debía continuar con su agenda. De fondo, porque una vez que la Corte terminó de discutir resolvió, por 19 votos contra 3, aceptar un recurso de revocatoria presentado por la magistrada Iris Rocío Rojas Morales precisamente a fin de evitar la charla.

La exposición que no fue

En la sesión de este lunes y previo a la presentación del relator, la magistrada Iris Rocío Rojas Morales presentó un recurso de revocatoria indicando que “El fin de las sesiones de Corte es avanzar con el gobierno judicial y este punto de la agenda no cumple con esta finalidad”.

Al tomar la palabra, Fernando Cruz Castro, presidente de la Corte, dijo: “Yo creo que si a la mayoría de los miembros de la Corte les parece que no es relevante o trascendental o que dadas las circunstancias de la agenda no se le puede escuchar yo no tengo problema en que lo sometamos a la revocatoria que propone doña Iris”.

Yo no puedo pretender imponerme contra viento y marea, si hay un grupo en contra de escucharlo en este momento, yo no tengo ningún problema.

El magistrado Luis Fernando Salazar Alvarado por su lado, indicó que no se comunicó con suficiente tiempo que el relator expondría frente a la Corte: “Debimos ser avisados con antelación para habernos preparado con las preguntas sobre los dos temas fundamentales que él nos trae”. Asimismo, señaló que este no es un tema para discutir en Corte. “Un tema de tanta trascendencia debe ser discutido en un foro donde estén conectados todos los servidores judiciales”.

Estos fueron solo sus dos puntos iniciales de objeción, pues acto seguido inició lo que no vino a ser otra cosa que su propia exposición, a partir de la cual indicó extensa y profusamente todas las razones por las que considera la Corte no debía recibir hoy al relator, repasando detalladamente los dos informes que fueron presentados en 2019 y 2020 por García-Sayán. De cualquier modo buena parte de la clase magistral que ofreció atendía a temas que si bien sí formaron parte de los informes del relator no iban a ser abordados en la exposición de este lunes, que se limitaba a la elección de magistraturas en Costa Rica. 

La magistrada Julia Varela Araya fue la siguiente en intervenir e indicó que precisamente una forma de obstaculizar la agenda es “tomar en exceso la palabra y para repetir a veces lo mismo”. En su exposición señaló que siempre se han encontrado pretextos para evitar esta discusión y no abordar temas como el tráfico de influencias que se han dado en muchos de los nombramientos de magistraturas en el pasado. Dijo que los talleres que pidió Salazar Alvarado en su exposición previa ya se han celebrado y que ya la ciudadanía también ha participado en esta discusión desde diversos espacios: “Es un tema más que tratado”. A pesar de eso, apoyó la moción de suspender la exposición y reagendarla en un momento más oportuno para evitar los contratiempos que se presentaron hoy.

La magistrada Patricia Solano Castro, vicepresidenta de la Corte, indicó que ella es de las que más se ha preocupado por el atraso en la agenda de la Corte y que así se evidencia cuando le corresponde liderar las sesiones. El grueso de su intervención abordó este tema en particular: el desafío de agilizar la agenda. Indicó que si bien la materia que se pretendía abordar en la exposición del relator “es un tema importante, que está pendiente de resolución” ella considera que no es en Corte Plena dónde se debe resolver. “Respeto la independencia de otros poderes  de la República”, dijo, indicando que no considera que sea competencia de la Corte discutir cómo resolver la problemática. Agregó que escuchar al relator es válido, pero no debe de hacerse dentro de sus espacios de trabajo, precisamente porque “uno de los grandes reclamos que se nos hace es la mora judicial”.

El presidente de la Corte, Fernando Cruz, tomó la palabra de nuevo para emitir un anuncio ciertamente pintoresco: “Don Álvaro Burgos me pidió la palabra, le voy a dar la palabra ahorita, pero es que les tengo que decir que tenemos que someter a votación lo que señala Doña Rocío, así dilucidamos este tema, pero ya recibí de Naciones Unidas indicación de que estaban esperando, el señor relator tenía la impresión de que sería una intervención de 30 minutos, máximo 45, y ya en su agenda tiene otras actividades, de modo tal que no lo vamos a poder recibir”.

El magistrado Álvaro Burgos Mata habló a continuación pero ya su aporte llegó en un momento limitado, tras el anuncio de Cruz. Defendió la importancia de que la Corte también participe en la discusión en torno a cómo resolver a futuro los nombramientos de las magistraturas. “Si no somos parte de la solución somos parte del problema”. Así mismo indicó que: “Desde mi perspectiva es totalmente claro que hoy don Diego venía a hablarnos específicamente del tema de la elección de magistraturas”, aludiendo a que la discusión previa de sus compañeras y compañeros se salió del tema que se iba a discutir este lunes.

El magistrado Fernando Castillo Víquez tomó la palabra para decir que ya que el relator “por razones de agenda no puede emitir su conferencia o discurso” “...no tiene sentido seguir discutiendo este tema, lo más prudente es que usted (Fernando Cruz Castro) retire este asunto de agenda”.

Cruz Castro indicó que si bien ya la discusión no tenía sentido él quería tener la consideración con la magistrada Rojas Morales que planteó el recurso. Se decidió entonces, que a pesar de que la votación no haría ninguna diferencia (dado que ya el relator no podría ofrecer la exposición) de todos modos se celebraría por protocolo para que quedara en actas registrada la voluntad de la Corte.

19 a 3

Una vez realizada la votación se determinó que 19 magistraturas votaron a favor del recurso de revocatorio de la magistrada Iris Rocío Rojas Morales y solo 3 en contra. Es decir, que de todos modos, si el relator hubiese estado presente esperando para ofrecer la exposición, no se le hubiera permitido, pues la voluntad de la Corte fue determinar que no tenía tiempo para conocer el tema en su sesión.

Tras la decisión de la Corte Plena, Naciones Unidas Costa Rica señaló que tomaban nota "con pesar" de lo acordado y reiteró su compromiso de acompañar a Costa Rica con las reformas en materia de independencia judicial en línea con los estándares y recomendaciones internacionales.