Desde su creación en la década de los cincuenta, los videojuegos han cautivado la atención de millones de personas en el mundo, ya sea como actividad de ocio, seguimiento del desarrollo tecnológico, para disminuir el estrés, apreciar los gráficos o recientemente, como una disciplina deportiva más

En la actualidad, la práctica de los deportes electrónicos a nivel mundial es una industria que, según datos de la consultora Newzoo, solamente en 2019 alcanzó los $152 mil millones de dólares en ingresos anuales con audiencias superiores a los 300 millones de espectadores.

Los Electronic Sports (e-Sports) corresponden precisamente a la transformación de los videojuegos en un deporte para espectadores y cuya competencia entre sus participantes es tan real como la ejercida en los deportes tradicionales.

Propio de su versatilidad, los e-Sports poseen una diversa gama de videojuegos competitivos, como lo son: League of Legends, Counter Strike, FIFA, Free Fire, Gran Turismo, Dota 2, Valorant, Rainbow Six, entre otros. En cada juego hay campeonatos mundiales, los cuales se transforman en actividades frenéticas cargadas de pasión, emoción y adrenalina.

De acuerdo con el reporte global de Newzoo en 2019, Asia abarcaba un total del 47% del mercado a nivel mundial y no es para menos, ya que su más fuerte desarrollador, Corea del Sur, se encuentra en esta zona. Europa y Norteamérica se posicionan como las segundas regiones en importancia, mientras que América Latina alcanzaba un 4%, pero con un constante crecimiento, que se prevé alcance al menos el 18% a finales del 2021.

A sabiendas de estos números, no es casualidad que enormes patrocinadores, como Mastercard, BMW, Mc Donalds, Samsung o Adidas, hayan querido ingresar en esta industria y dar su aporte. 

Sumado a dichas empresas, muchos equipos de fútbol y baloncesto ya han dado un paso al frente, como por ejemplo: el Real Madrid. Hace dos años, el presidente de la entidad blanca (Florentino Pérez Rodríguez) indicó que en la ciudad deportiva de este equipo se construirá un estadio para juegos electrónicos. Por otro lado, el Paris Saint Germain de Francia, los Golden State Warriors de San Francisco y 76ers de Filadelfia ya fundaron su propio equipo profesional de videojuegos.

Un club de talla mundial con sede en Costa Rica

Guillete Infinity Esports es el nombre del club nacional fundado en el año 2009 por el costarricense Paul Venegas, quien luego de una difícil situación personal, encontró la forma de que su pasión por los videojuegos comenzara a trascender como una alternativa diferente.

El equipo probó suerte en varias disciplinas, pero en 2014 se metió de lleno con League of Legends (LoL), la disciplina electrónica más popular del mundo. Gracias a este paso, Infinity tuvo un crecimiento exponencial por toda América Latina y consiguió el patrocinio de Guillete, Logitech, Office Depot y recientemente TikTok, convirtiéndose así en el primer club de la región con una alianza comercial de esta magnitud.

La empresa funciona con base en tres pilares que son:

  • El manejo y competencia de los equipos e-Sports
  • La operación de Gaming Center (abrieron uno en el Centro Comercial Oxígeno, con capacidad para 80 personas)
  • Producir contenido especializado sobre videojuegos (en diversas plataformas, como Twitch y Youtube)

Nicolás Lescano, gerente de comunicación de la compañía, conversó con LaJornada.cr sobre las bases del proyecto: 

Nuestro juego principal es League of Legends, a finales de 2017 e inicios de 2018 es que entramos los demás socios, que somos argentinos, tratando de darle una impronta y expansión al club dándole muchas más condiciones a los jugadores y en 2018 logramos convertirnos en el primer campeón latinoamericano en la League of Legends” 

A partir del título latinoamericano de LoL, Infinity empezó a buscar nuevos horizontes en 2019, incursionando en: Free Fire, Counter Strike, Rainbow Six Siegue y Gran Turismo, juego en el que ya consiguieron un campeonato en GT World Tour Nueva York 2019, gracias al trabajo del piloto costarricense Bernal Valverde.

Actualmente contamos con 10 equipos y con un staff de 70 personas donde se pueden encontrar, preparadores físicos, psicólogos deportivos, entrenadores, parte administrativa, producción, por supuesto jugadores, tal cual un club tradicional de futbol, por ejemplo.” 

Actualmente los deportes electrónicos también fungen como una oportunidad laboral. Según Lescano, el videojugador puede optar por la creación de contenido, convertirse en entrenador o comentarista de estas disciplinas electrónicas.

En Costa Rica sabemos que tenemos los ojos puestos de las personas que buscan desarrollar esta actividad y es nuestra responsabilidad aconsejar y transmitir nuestras experiencias porque somos un club costarricense

Búsqueda de la oficialización como deporte

Felipe Montoya, el actual presidente de la Federación Nacional de Juegos Electrónicos (ente no oficial), indicó que Costa Rica es pionero (en América Latina) en la práctica de deportes electrónicos, pero que en temas relacionados al reconocimiento e institucionalización, se encuentra rezagada respecto a otros países europeos y norteamericanos

Una de las particularidades del mercado costarricense es su tamaño y las empresas de consumo masivo lo ven como una parte de Centroamérica y eso hace complicado conseguir patrocinio, de igual forma, las marcas locales no están al tanto del impacto que está generando la práctica de los e-sports y muchas veces tenemos que tratar de conseguir patrocinio con marcas de fuera del país” 

Según Montoya, los juegos deportivos electrónicos son una gran oportunidad para el país y si recibieran el reconocimiento oficial por parte del Instituto Costarricense del Deporte y la Recreación (ICODER), podrían acceder a mejores instalaciones, asociaciones, procesos olímpicos, patrocinios y demás facilidades con las que cuenta una federación oficial.

Tal como sucede en Asia, el desarrollo de los deportes electrónicos en Costa Rica podría beneficiar al turismo, ya que atraería a competidores y sus seguidores al país

Montoya indica que ya se han hecho esfuerzos para que el reconocimiento oficial sea una realidad. En el año 2019, por ejemplo, Costa Rica fue el organizador del primer foro a nivel centroamericano de deportes electrónicos, el cual sirvió para acercar industrias y entidades gubernamentales al tema. En esta actividad se contó con la participación del ICODER, quienes muestran interés, pero sin movimientos concretos por ahora, según Felipe.

Nuestra prioridad es el reconocimiento e instauración de la federación para este año, pero además de esto, actualmente estamos impulsando un proyecto llamado CREER (Costa Rica Electronics and Entertainment Revolution), que comenzó como un evento, pero la idea es que se convierta en una fundación para apoyar el desarrollo del deporte electrónico e iniciativas innovadoras en el área de tecnología, ciencia y electrónica para unificar industria, instituciones educativas e instituciones privadas con proyectos de innovación y lograr una sinergia con metas a corto y mediano plazo

En Corea del Sur, Francia, China y Alemania, por ejemplo, tienen modelos de organización muy fuertes y cuentan con muchas facilidades para los atletas. Estos avances se han logrado a partir de la unión entre la industria privada y gobierno, la alianza que se busca establecer en nuestro país. 

Según Montoya, la oportunidad está "en bandeja de plata" y ahora dependerá del país tomarla o no.  El Deportivo Saprissa, la principal marca deportiva de Costa Rica, ya tomó la delantera y anunció este jueves la conformación de su propio equipo de deportes electrónicos para participar en la Liga Centroamericana de League of Legends, convirtiéndose así en el primer equipo de futbol en América Central que incursiona en los e-Sports a nivel profesional.

Dado el caso que usted conozca a un prodigio en los videojuegos, anímese a apoyarlo y contarle que Guillette Infnity Esports tiene visores, los cuales están a la vanguardia de encontrar talentos. Recuerde que el país también tiene su propio campeonato de League of Legends y proyectos como CREER, los cuales andan buscando que los deportes electrónicos costarricenses no paren de crecer.