Por Daniela González Pereira – Estudiante de la carrera de Ingeniería Informática
“Cuanto mayor sea nuestra atención, más clara, rápida y sutilmente captaremos, aún en situaciones ambiguas, el estado interno de otra persona. E, inversamente, cuanto mayor sea nuestro desasosiego, menor será también nuestra capacidad de empatizar.” (Goleman, s.f). Actualmente en la sociedad se han visto bastantes cambios sociales, entre ellos están los cambios de actitudes y como hoy en dia las personas se relacionan entre sí, eso es debido a la inteligencia social. La cual se desarrolla con cada día que pasa así dando grandes beneficios a la vida, para presente y futuro.
Los seres humanos tenemos la capacidad de comunicarnos de manera empática con otras personas en diferentes situaciones de la vida y esto se puede definir como inteligencia social. Una manera efectiva de llevar esta capacidad es con el manejo de las emociones, por eso es que este término también es constantemente relacionado con la inteligencia emocional debido a que ambas poseen actitudes que se apoyan entre sí para un mejor control de las situaciones cuando se presentan círculos sociales, de esta manera se pueden desarrollar ambientes amenos y pacifistas ya que las personas involucradas saben cómo comportarse con respecto al lugar donde se encuentran (Gomez, s:f). Es un atributo que se posee desde el nacimiento y el cual se desarrolla con forme a los valores que se atribuyen desde una temprana edad. En base a eso se define el nivel de inteligencia social que puede poseer una persona.
Esta cualidad puede llegar a perfeccionarse con el pase del tiempo para adaptarse de una mejor manera en los sitios donde estemos. Es un factor de gran importancia cuando se habla de un ambiente laboral debido a que en estos lugares se deben de llevar muchas interacciones con diferentes tipos de personas, tales como los jefes, los compañeros de trabajo e incluso los mismos clientes. La capacidad de entablar una conversación de manera correcta puede ocasionar un reconocimiento por parte de los demás, ya que mostrar empatía a los otros puede lograr sentimientos de comodidad y confianza. Una mejoría en este ámbito puede crear líderes innatos o bien compañeros de trabajos que logren apoyarse entre sí para lograr un mejor trabajo. De esta manera se crean ambientes de armonía y colaboración, a su vez si se mantienen buenas actitudes e interacciones las otras personas pueden llevar a tomar a una persona como ejemplo a seguir y en el ámbito laboral esto puede significar un avance muy significativo. (Uvirtual, 2020)
En conclusión, la inteligencia social a pesar de ser una característica con la que nacemos se puede ir mejorando y adaptando al gusto de cualquier persona para que las relaciones sociales que se presenten en el día a día puedan ser manejadas de una manera responsable y que el ambiente se mantenga ameno para todos los involucrados. Es una habilidad que a fin de cuentas funcionará para el ámbito laboral ya que en la actualidad cientos de empresas requieren personal que tenga una buena inteligencia social, lo que quiere decir que representen un buen ejemplo para otros y que sepan cómo manejar situaciones de estrés con buenas acciones. Es una de las cualidades más importante en la mente de un ser humano y si se utiliza de manera correcta puede dar grandes éxitos a futuro.
