Por Stephanie Solano Méndez - Estudiante de la carrera de Ingeniería biomédica
¿Qué es la inteligencia social y cómo desarrollar esta habilidad para tener éxito en su vida? A partir de los años noventa esto es un tema que ha despertado interés entre la sociedad. La inteligencia social es la capacidad que tiene una persona de conocer sus propias emociones y saber cómo gestionarlas de manera adecuada. Además, esta habilidad social también le permite conocer las emociones de las personas que se encuentran a su alrededor, lo cual facilita la comunicación y mejora las relaciones interpersonales. Tradicionalmente, se le da mayor importancia al cociente intelectual y se deja de lado la inteligencia social, lo que es un gran error debido a que ambas se encuentran conectadas. Por ello, es importante practicar la inteligencia social, ya que el éxito de su vida puede depender en gran parte de esta habilidad.
La inteligencia social es una habilidad que le permite a las personas conectarse entre sí de manera empática, por lo tanto es importante que desde niños esto sea algo que se encuentre dentro de la educación para que la puedan ir desarrollando con el crecimiento, ya que con esto aprenderán a dialogar, a trabajar en equipo, resolver problemas de manera armoniosa, gracias a la habilidad que le ayuda a controlar sus emociones, entre otras (Benítez, 2010). Algunos componentes que influyen en el desarrollo de la inteligencia social son la empatía, el liderazgo, la asertividad, la capacidad de escuchar y prestar atención, saber analizar el lenguaje no verbal de los demás, gestionar el bien físico y ser influyente. Es importante que cada uno de estos elementos se ponga en práctica diariamente para lograr obtener un mejor desempeño en todos los ámbitos de la vida.
La inteligencia social se puede dividir en dos comportamientos. En primer lugar, se encuentra el comportamiento tóxico. En este caso, las personas aprovechan esta habilidad social para que los demás se sientan intimidados, molestos, frustrados, entre otros. En segundo lugar, está el comportamiento nutritivo. En este caso, las personas procuran hacer que los demás se sientan respetados y a gusto con la relación. Ambos comportamientos se pueden encontrar tanto en el ámbito laboral como el personal, pero especialmente debemos aprender cómo lidiar con el comportamiento tóxico (Sabater, 2018). Por un lado, se debe tener claro que las personas que cuentan con inteligencia se orientan hacia la búsqueda de soluciones y no de problemas. Por otro lado, se deben poner límites y dejarle saber a la persona que todos sus actos tienen consecuencias. Por último, es necesario poner distancia emocional para que esto no le llegue a generar afectaciones en su salud física y mental.
El impacto que genera la inteligencia social en los seres humanos es mayor de lo que se puede imaginar. Por esta razón, es indispensable que esta habilidad se encuentre presente en la vida de cada persona desde la niñez. Se debe tomar en cuenta que esta inteligencia les permitirá comunicarse de manera asertiva, controlar sus emociones y tener mejores relaciones interpersonales. Además, la inteligencia social también le ayudará a comprender y lidiar los comportamientos tóxicos que se puedan presentar en la vida. De esta forma, usted podrá tener una vida más saludable y armoniosa.
