La surfista costarricense Brisa Hennessy aprovechó su presencia mediática dentro del World Surf League (mayor promotora de surf a nivel mundial) para canalizar donaciones internacionales a Costa Rica Makes me Happy, Waves and Smiles y Pollo Surf School, dos fundaciones y una escuela de surf costarricenses que se han visto afectadas por la crisis económica y sanitaria.
Mediante los programas WSL Stay Local y WSL Pure, Hennessy optó por dar su "granito de arena" a las costas que la vieron crecer, pese a no vivir en territorio nacional desde hace 11 años. En el caso del programa WSL Stay Local, la atleta donaba el monto que ella quisiera y la World Surf League lo duplicaba, estableciendo los $2000 como límite.
Estoy agradecida por haber tenido la oportunidad de ayudar a Costa Rica Makes Me Happy, Waves and Smiles, a nivel internacional con WSL Pure y WSL Stay Local”
La clasificada a Tokio 2021 eligió a Costa Rica Makes me Happy, Waves and Smiles y Pollo Surf School porque está convencida de su compromiso con la sociedad y el medio ambiente, además de saber que están pasando por un momento muy complicado a raíz de la pandemia ocasionada por la COVID-19.
Costa Rica Makes me Happy es una organización ambientalista encargada de recuperar y reutilizar los desechos plásticos, construir hogares para familias necesitadas y educar a los consumidores sobre los problemas de los plásticos de un solo uso.
Por otro lado, Waves and Smiles es un proyecto que trabaja con niños y niñas de comunidades vulnerables en Limón, utilizando terapias de surf para incentivarlos a continuar sus estudios, cuidar el medio ambiente y convertirse en seres humanos modelo en sus respectivas comunidades.
Mike Castro, representante de Waves and Smiles, comentó:
Con lo recolectado estaremos adquiriendo equipo de higiene para los chicos como alcohol en gel, mascarillas y otros elementos”
Aunado a las donaciones a estas dos fundaciones, Brisa también compró lecciones a Pollo Surf School para donar a niños y niñas necesitados de Pavones, Puntarenas y apoyó un negocio local en Fiji, país en el que actualmente reside por el trabajo de sus padres en un hotel de Namotu Island.
En Fiji tenemos mucha suerte porque no hay casos en este momento y estamos muy seguros y saludables en la isla Namotu. Solo podemos viajar un poco dentro de Fiji. Creo que lo más difícil de todo esto ha sido no ver a mi familia y amigos de todo el mundo. Extraño viajar, ver a las personas que amo y hacer lo que amo”
Durante los últimos dos años, Brisa Hennessy se ha convertido en una figura muy reconocida del Tour Mundial por su juventud y prometedora carrera. Pese a solo tener 20 años, la tica ya destaca entre las mejores 10 surfistas del planeta tierra, muestra de ello estar presente en la lista de las 8 atletas que tienen un cupo asegurado en los Juegos Olímpicos de Tokio 2021:
- Sally Fitzgibbons (Australia)
- Stephanie Gilmore (Australia)
- Johanne Defay (Francia)
- Tatiana Weston-Webb (Brasil)
- Silvana Lima (Brasil)
- Carissa Moore (Estados Unidos)
- Caroline Marks (Estados Unidos)
- Brisa Hennessy (Costa Rica)
A raíz de su doble nacionalidad, la joya del surf mundial tuvo la posibilidad de representar a Estados Unidos o Costa Rica en competencias internacionales, pero gracias a su excelente relación con la surfista Leilani McGonagle y sus "hermosos recuerdos" de infancia en Matapalo, Puntarenas (donde aprendió a surfear) optó por ponerse la camiseta tricolor.
Sé que es un momento difícil para todos, pero más que nunca debemos ser fuertes y amables con nosotros mismos y con los demás. ¡Difunde el amor y pura vida tanto como podás!”
Desde el pasado 12 de marzo, las paradas del Tour Mundial (en el que compite Brisa) están canceladas a raíz de la crisis sanitaria mundial. World Surf League no ha logrado reanudar el calendario porque la temporada 2020 requiere de muchos traslados internacionales para llevarse a cabo.
La propia Brisa acepta que “con suerte podrían regresar en noviembre, pero es difícil decirlo en este momento”. Actualmente Hennessy continúa sus entrenamientos con normalidad porque está aislada con su familia en una isla prácticamente desierta en Fiji.
Así vive la costarricense en Namotu Island, Fiji: