La surfista costarricense, Leilani Marie McGonagle Cada, obtuvo el diploma en Comunicación de la Foothill College en California, Estados Unidos. Tras dos años y medio de esfuerzo, la deportista de alto rendimiento aprovechó la cuarentena para terminar los cursos que le faltaban y obtener el privilegio de graduarse con honores.

Estudiar no es un plan B; ya me ha ayudado en tantas maneras. Espero que los jóvenes atletas se inspiren a seguir sus estudios y sus sueños más grandes."

Durante este lapso de tiempo, Leilani ha llevado en paralelo su carrera profesional y los estudios en línea, ya que la universidad californiana ofrece esta modalidad. Pese a competir internacionalmente desde el 2013, la surfista de 20 años nunca dejó el colegio (también lo llevaba en línea) y al salir, siempre tuvo muy claro que "hay una vida después del deporte y debía estar preparada".

La oriunda de Pavones, Golfito acepta que, pese a sus compromisos en el extranjero, el centro educativo nunca le brindó un trato preferencial y siempre fueron muy rígidos ante las entregas de los trabajos.

Un día tenía que competir y también presentar un examen. Se lo comenté al profesor y él me dijo que esto era la vida real y debía realizar el examen ese día. Me obligó a cambiar mi vuelo para entregar el examen ese día”.

Aunque recién termina su diplomado, Leilani tiene muy claro su siguiente objetivo: sacar una especialidad en Relaciones Públicas de la California State University Bakersfield (CSUB), durante los próximos dos años.

Desde su llegada del "Clasificatorio al Tour Mundial (QS)" en Australia (marzo), la deportista nacional se ha mantenido en territorio tico a la espera de que la Liga Mundial de Surf (WSL) logre reanudar las competencias, un hecho que aún parece lejano.

El estrés generado por esta pausa, sumado a las medidas del Ministerio de Salud, la han llevado a descargar sus sentimientos a través de la escritura o mediante un nuevo proyecto en Youtube. El 6 de mayo, por ejemplo, escribió un valioso texto sobre salud mental en el medio especializado crserf.com

Los que me conocen, saben que soy una feliz, positiva y sin caprichos. Me la paso vacilando mientras sigo mis ambiciones. Aquí voy a hablar solo por mí: pánico, ansiedad, pesadillas, y hasta la perdida del sueño; son parte de mí hoy, después estos 45 días sin tocar el mar. Ya en varias ocasiones, he llorado en mi cuarto."

Leilani festejó este logro académico mediante una publicación en redes sociales y aunque posó con el birrete, aún no tiene en sus manos el diploma. Para recogerlo deberá viajar a California, sin embargo, aún no puede hacerlo por las restricciones de vuelos. 

En este caso, su abuela (que vive en Estados Unidos) le hará el favor de ir a la universidad y guardarle el título, mientras todo regresa a la normalidad. En una entrevista, realizada con este medio en abril, Leilani confesó que la unión familiar es su medicina para nunca claudicar.

Mi abuelita...mis papás siempre me han apoyado muchísimo. Mis padres se vinieron de California hace 30 años y asumieron el reto de hacer una vida aquí, empezando desde cero. Al principio les costó mucho, pero fueron muy disciplinados y ahora tienen un hotel en Pavones. Esa actitud de no dejarse vencer la imprimieron en Noe Mar (también surfista profesional) y en mí."

Por ahora, la surfista se mantiene en casa a la espera de nuevas noticias por parte de la "Liga Mundial de Surf (WSL). McGonagle tiene la esperanza de que se reanuden algunos torneos para tomar forma y luchar por su máximo sueño en la actualidad, ser la segunda surfista costarricense clasificada a Tokio 2021. 

Brisa Hennessy es una de mis mejores amigas desde hace muchos años. Nos conocimos en competencia y yo fui una de las que le insistió que compitiera para Costa Rica (tenía posibilidades de representar a Estados Unidos). Sería un sueño competir con ella en Tokio y representar a los ticos. Amaría eso."