Por Fabián Zúñiga Sáenz – Estudiante de la carrera de Administración de negocios
La banda británica Radiohead fue fundada en 1985 y, tras un inicio poco brillante, a inicios de los años 90 lograron despegar artística y mediáticamente gracias a sus trabajos más populares. Tras haber alcanzado el éxito, varios medios de comunicación no relacionados al mundo de los espectáculos han informado sobre características particulares en la manera en la que esta banda ha manejado sus finanzas. Se pretende utilizar este modelo de trabajo como ejemplo para señalar la importancia de la contabilidad financiera en el manejo de negocios usando el caso particular de una banda de música alternativa que, de manera disruptiva, ha mostrado no solo control sobre su audiencia y sus productos artísticos, sino sobre su modus operandi como compañía. De esta forma se señalarán algunos de los beneficios que ha traído a la banda realizar la toma de decisiones basándose en una estructura diseñada por sus integrantes y la firma Hardwick & Morris, que ha ayudado a la banda a alinear sus diferentes productos en compañías separadas.
Shubber (2016) señala que después de 2003 los miembros de Radiohead crearon compañías que respaldaran cada lanzamiento de un álbum con bajo capital compartido entre sus socios (empresas de responsabilidad limitada) y más capital líquido. Esta es una clara señal de una decisión contable inteligente: los álbumes se cancelaron mediante débito a cuentas financiadas por aportes de miembros de la banda (párr. 6).
Otro de los beneficios fue indicado por Lenore (2016), quien menciona la decisión de separar los riesgos de cada álbum y gira en compañías. Por ejemplo, cuando, durante una gira, un ingeniero de escenario murió producto del derrumbe de una estructura de trabajo, tener una empresa para la gira en la cual se encontraban, protegió los ingresos por concepto de otros trabajos en caso de que la familia del fallecido demandará a la banda. Dicho ingeniero fue contratado por una de las más de 20 empresas que los británicos controlan.
Otras empresas que controla la banda, y pueden ser nombradas, son w.a.s.t.e. (sitio web alterno) donde se realiza la venta de mercadería de la banda y se comparte contenido sobre tiquetes para sus conciertos y materiales adicionales; The hub, Odds & Ends, etcétera.
Es importante entender que otra decisión contable/financiera importante fue registrar estas compañías como Sociedades de Responsabilidad Limitada. Como afirma Shubber (2016) esta decisión da más libertad a los músicos de tomar decisiones, como retirarse y cobrar su parte del negocio, cuando la relación entre los socios no sea “tan cordial” (párr. 12), lo cual es parte de la naturaleza del negocio del arte, donde se dan separaciones en diversos casos y circunstancias.
Para el lanzamiento de su último trabajo, una movida maestra incluyó generar una campaña de expectativa removiendo de las redes sociales todo el contenido relacionado con la banda. Esto atrajo la atención de muchísimos medios, según informó Loughrey (2016) y funcionó como una campaña a coste cero, muy efectiva desde la perspectiva financiera y mercadológica.
El imperio de Radiohead abarca no solo sus decisiones artísticas, sino un gran engranaje con múltiples compañías. Esto nos da una referencia directa del argumento sobre la importancia de la contabilidad financiera para la toma de decisiones en este ámbito específico. Es sin duda válido decir que la banda, sin la asesoría correcta, no habría logrado conectar sus productos, sus sociedades y sus bienes para producir estabilidad, flexibilidad, independencia del mercado y de los sellos discográficos, así como proteger sus números ante los riesgos que su profesión pueda generar.
