"Nosotros desarrollamos estos dispositivos para generar una conectividad bajo el agua. La función de un router en una oficina es dar conectividad wifi, nosotros hacemos eso pero bajo el agua", resume Kevin Alfaro, director ejecutivo y uno de los fundadores Narwix, a Delfino.cr.

Este emprendimiento llevado a cabo por estudiantes del Tecnológico de Costa Rica (TEC) y que dio sus primeros pasos en 2018; investiga, desarrolla y comercializa dispositivos del Internet de las Cosas (loT siglas en ingles) bajo el agua.

loT es una red de objetos físicos ( vehículos, máquinas, electrodomésticos y más) que utilizan sensores para conectarse e intercambiar datos por internet. En el caso de Narwix, el componente de la conectividad bajo el agua es el que da el modelo innovador.

"Estamos dando internet y conectividad inalámbrica para actividades que se desarrollan en este ambiente: buceo, actividades submarinas, protección ambiental, maricultura, cualquier actividad que se desarrolle o necesite monitorear algo bajo el agua se ve beneficiada", señaló Alfaro.

Si una empresa quiere medir la salinidad del agua, por ejemplo, esta startup, que actualmente cuenta con 5 personas trabajando en ella, conecta dispositivos y sensores bajo el agua con uno en tierra y este posteriormente lleva los datos a un computador para ser analizados.

El nombre de este dispositivo es Díglo. Es de los principales dispositivos de comunicación de Narwix. Imagen: Narwix

Las tecnologías de conectividad bajo el agua existentes son limitadas o nulas

El nombre de esta iniciativa viene del cetáceo narval, que es conocido como el unicornio marino gracias a su largo colmillo, el cual utiliza como defensa en sus luchas, como un sensor de condiciones de temperatura y salinidad del agua, y para rituales de apareamiento, según estudios del Marine Mammal Science.

En un principio, los jóvenes estudiantes de ingeniería en computación, ingeniería en construcción e ingeniería en electrónica, empezaron a buscar problemas y detectaron dificultades en la comunicación de los buzos, pero con el tiempo se dieron cuenta que los vacíos eran más grandes. 

"Lo que existe actualmente para trasmitir datos bajo el agua está enfocado al sector industrial, a la parte militar, extracción de petróleo, extracción de gas natural, entonces quedan muchos sectores que realizan actividades y que se podrían ver beneficiadas por la actividad tecnológica en esta área. Lo convertimos en un proyecto de telecomunicaciones subacuáticas", afirmaAlfaro. 

Este emprendimiento que empezó probando sus dispositivos en pequeñas piscinas y peceras, en los últimos meses ha ganado fondos gracias al Programa para Impulsar Proyectos de Innovación Tecnológica (PITs) y a iniciativas del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones (MICITT), aparte de llevar el proceso de incubación mediante TEC Emprende Lab, lo que les ha permitido contar con un espacio de trabajo y acceso a una red de contactos, que han impulsado la propuesta.

"Estábamos estudiando y queríamos hacer algo diferente", comenta uno de los fundadores del proyecto. Imagen: Narwix

En la actualidad tienen conversaciones con empresas gubernamentales, organizaciones de protección ambiental, investigadores y empresas científicas. "Narwix es la única empresa  a nivel centroamericana que desarrolla este tipo de tecnologías e incluso a nivel mundial son muy pocas", nos cuenta Alfaro. 

Proyectos de investigación ambiental, maricultura, protección ambiental gubernamental, por citar algunos, pueden llegar a utilizar los dispositivos Narwix para precisar métodos, hacerlos más efectivos y a la vez  pueden tener un beneficio económico a nivel de reducción de costos.

En el presente los jóvenes realizan un prototipo con pruebas finales en espacios de laboratorio como eWave, para crear un dispositivo cada vez más resistente y que se mantenga en el océano por largos periodos de tiempo sin daños, al tiempo que trabajan en la atracción de fondos capital para el lanzamiento final del producto al mercado nacional e internacional.