— El día 18 de la huelga nacional no pasó sin controversia, pero esta vez empezó desde temprano. En horas de la mañana explotó a toda velocidad la noticia de que un grupo de sindicalistas estaban bloqueando las salas de operaciones en el Hospital San Juan de Dios (HSJD).
— La información que circuló, fue brindada por Ileana Balmaceda, directora del HSJD, quien dijo:
“Tenemos una situación crítica, porque por el movimiento de huelga nosotros hemos tenido un atraso para los pacientes de cáncer. Tenemos 80 pacientes en lista, tenemos ya casi 3 semanas, hemos estado operando solo emergencias. (…) Hoy el sindicato tomó la sala de operaciones. ¿Esto que implica? Que no nos están dejando operar ni las emergencias, ni los pacientes con cáncer que ya estaban preparados para iniciar el día de hoy desde las 7 de la mañana. El sindicato se reunió, no pidió permiso para hacer una reunión dentro de la Sala y lamentablemente nos está bloqueando el quehacer. (…) Además, uno de los sindicalistas, que es un asistente de pacientes, está definiendo él qué se opera y qué no se opera“.
— El presidente Alvarado no tardó en reaccionar ante la denuncia y puso a disposición de la CCSS a la Fuerza Pública, en caso de que fuera necesaria para asegurar la operación de los centros de Salud.
— Los sindicatos rápidamente negaron las versiones de Balmaceda y de Alvarado, a través de Martha Rodríguez del Bloque Unitario Sindical y Social Costarricense quien dijo:
“Desmentimos categóricamente la información falsa que algunos medios de información han estado difundiendo. No es cierto que los trabajadores y trabajadoras hayan obstaculizado cualquier cirugía en el Hospital San Juan de Dios. (…) Nosotros hemos mantenido nuestro compromiso de atender las emergencias y los encamados cuando sean necesarios“.
— Entonces, ¿Qué fue lo que pasó?
- El Hospital había anunciado el miércoles un plan de emergencia para atender las operaciones que consistía en trabajar con equipos quirúrgico proveniente del Centro de Atención Integral de Salud (CAIS) de Puriscal, para solventar el atraso en las operaciones.
- A las 7 de la mañana, personas del movimiento sindical (Sindicato Nacional de Enfermería y Sindicato de Salud y Seguridad Social) realizaron una asamblea en el comedor del área quirúrgica del HSJD. En dicha asamblea estaban participando parte de los equipos quirúrgicos que iban a empezar operaciones a esa hora. Para la realización de esta asamblea no se coordinó con las autoridades del hospital, y según Balmaceda no se debió haber realizado en esa área de cirugía. Sin embargo, según Lenin Hernández (secretario general del SINAE) con el personal de cirugía es “usual” hacer reuniones ahí.
- A las 8:11 la CCSS reportaba que había “retomado el control” e iniciado la realización de las cirugías
- A las 8:15 de la mañana, a solicitud de las autoridades del Hospital, la notaria institucional se hace presente y levanta un acta de los hechos. A esa hora reporta que todavía había un grupo de personas (aproximadamente 40) dentro del comedor del área de cirugía.
— Eso fue todo. Se pueden preguntar ¿cómo pasamos de eso a la guerra mediática entre ambos bandos ? Pues, como hemos venido diciendo, los ánimos están caldeados y ambas partes están buscando cualquier cosa que les pueda ayudar a inclinar la opinión pública a su favor. Sobra decir que es el escenario perfecto para que germinen rumores, ataques y tensión a granel (ver punto 2).
— Así las cosas volvemos a repetir que no está de más recordar que en estos momentos necesitamos tener más calma; escuchar primero y postear después.
— Eso sí, si bien el Gobierno se precipitó en su mensaje, no se puede ignorar que este movimiento —especialmente en el caso de la CCSS— no ha dejado los mejores precedentes, en tanto se han dado reacciones de choque ante las medidas de contención de la Caja para asegurar el mantenimiento de los servicios.
— Recordemos que durante la primer semana de huelga, al molestarse por la sustitución de los servicios de lavandería, manifestantes bloquearon la salida de ropa sucia del centros de salud. En aquel momento Román Macaya, presidente ejecutivo de la CCSS había señalado:
“Estamos viendo mayores niveles de agresividad hacia sus compañeros de trabajo que siguen trabajando. Estamos viendo compañeros que llegan a trabajar a una lavandería o que están manejando una ambulancia ser agredidos verbalmente o amenazados“.
— Así que, si bien las declaraciones de Balmaceda transmitieron un mensaje que exacerbaba los ánimos —al dar a entender que los quirófanos estaban “tomados”— e hicieron al Gobierno quedar mal por no comunicar efectivamente lo que estaba sucediendo, los sindicatos tampoco pueden pretender que no estamos enfrentando una seria crisis en servicios esenciales de salud merced a la huelga
— Además, es un hecho probado que sí hubo un atraso en el inicio de 9 cirugías y desde ya sale una colección de cajitas blancas para quienes crean que fue una infeliz coincidencia que se hiciera una “asamblea” en el comedor el mismo día que un equipo adicional llegaba a ayudar a avanzar con las listas de espera producto de la huelga. Sinceramente podemos entender la frustración de la señora Balmaceda: está haciendo de tripas corazón trabajando contra viento y marea y no se puede perder eso de vista.
— Nótese que el mismo Lenin Hernández en una llamada a Noticias Monumental señaló que miembros de otro sindicato —cuyo nombre no quiso dar— estaban molestos por la llegada de equipos del CAIS de Puriscal para ayudar con las cirugías atrasadas. Nadie en su sano juicio puede esperar la empatía de los costarricenses ante actitudes como esta.
— En fin: una vez más ambas partes manejaron mal la comunicación y escalaron a niveles innecesarios un tema que con pudo y debió resolverse en cuestión de segundos ahí mismo, en el hospital.
— Más allá de lo sucedido el día de ayer no podemos dejar de señalar a los verdaderos responsables de esta situación: el Poder Legislativo y el Poder Judicial.
— Primero la Asamblea por haber aprobado la Reforma Procesal Laboral —ampliaremos sobre esto en el punto 3— con vacíos legales nivel Dios que nos tienen a 19 días de huelga con solo 9 declaratorias (8 de ilegalidad y 1 legal), más de 20 procesos pendientes y un país entero preguntándose para qué decimos que los servicios esenciales no pueden ir a huelga si de todos modos van a ir a huelga como si nada.
— Segundo el Poder Judicial porque no solo revisaron y le dieron visto bueno a la Reforma Procesal Laboral. Además, tienen al país en esta zozobra por no hacer las declaraciones pronta y oportunamente. Podemos y debemos ser más eficientes especialmente en condiciones como esta que son claramente de crisis.
— Todo esto es especialmente frustrante en el caso de la CCSS, ya que la Sala Constitucional ha reiterado en 20 ocasiones —sí, leyeron bien ¡20!—, que las huelgas en los servicios de salud están prohibidas, por lo que no se debería durar tanto en hacer la declaratoria de ilegalidad en ese caso.
Datazo D+: El artículo 8 de la Ley Orgánica del Poder Judicial establece que “Los funcionarios que administran justicia no podrán: aplicar leyes ni otras normas o actos de cualquier naturaleza, contrarios a la Constitución Política o al derecho internacional o comunitario vigentes en el país. (…) Tampoco podrán interpretarlos ni aplicarlos de manera contraria a los precedentes o la jurisprudencia de la Sala Constitucional. (…)”
— No por nada los representantes de la Unión Nacional de Empleados de la Caja y la Seguridad Social (UNDECA) se escondieron por 10 días para no ser notificados y atrasar lo más posible la declaratoria —con la complicidad tácita del inoperante Poder Judicial que no uso oportunamente las herramientas legales de las que dispone para realizar la bendita notificación—.
— La salud y la vida de muchos costarricenses están en riesgo. No basta con “atender las emergencias y los encamados cuando sea necesario” mientras el resto de la operación de los centros de salud se ve seriamente afectada por la huelga. Lo dice la Sala y lo dice la propia RPF, la huelga no puede ser legal si el servicio es esencial. No hay nada más esencial que la atención de la salud. ¿Por qué nos está costando tanto entenderlo?
Esta nota es parte del Reporte: Pasada la medianoche Gobierno y sindicatos anunciaron potencial acuerdo