— La diputada María Inés Solís (PUSC) se comió la bronca del año y cumplió con lo anunciado: presentó una moción de reiteración para que las grandes cooperativas (con rentas superiores a 106 millones anuales) paguen impuesto sobre la renta escalonado.
— “Quien lucre debe pagar impuesto de renta, sin importar quien sea”, dijo Solís en su momento, cuando anunció la movida. Lo más interesante del gesto no es el hecho de que la diputada sea sancarleña (léase: qué vecina más incómoda para Dos Pinos) sino que Solís conseguirá que los costarricenses finalmente sepan qué partidos quieren evitar que la grandes cooperativas se ven afectadas por el plan fiscal.
— No es tema menor. Dentro de los muchos misterios que ha dejado este plan fiscal ese es, por excelencia, uno de los más significativos: en qué momento y de qué manera se esfumó la posibilidad de que las grandes cooperativas pagaran renta. La ministra de Hacienda Rocío Aguilar reconoció en su momento que el Gobierno tuvo que ceder en ese punto para que el plan caminara pero… ¿ceder ante quién?
— La diputada Solís había dado a entender que la respuesta estaría en las bancadas del PLN y el PAC (“da la impresión (de) que las cooperativas tienen los contactos suficientes en el PAC y PLN para que los defiendan”) y bueeeeeeno… todo parece indicar que no anda muy lejos de la verdad.
— Sin embargo, sí es prudente rescatar que el día de ayer nuestros periodistas Trilce Villalobos y Luis Madrigal conversaron con la ministra Aguilar —pronto podrán leer la espléndida entrevista— y, consultada sobre el tema, dijo:
“Si estuviera en mis manos el sector cooperativo operaría con una renta diferenciada… (…) yo fui la que tomó la decisión de incorporarlo en el proyecto (…), no es que yo no tengo sensibilidad hacia el sector y no tengo ninguna duda sobre la función súper importante que cumple pero la pregunta es si eso le da mérito suficiente para no contribuir al impuesto… (…) las cooperativas disfrutan de la educación en la que invierte el Estado, de las carreteras, de los servicios eléctricos, de la telefonía, de internet, eso no cuesta cero, eso lo financian los costarricenses a través de los impuestos… yo creo que ha llegado el momento de plantearlo”.
— Entonces… si la ministra metió originalmente a las grandes coorporativas en su plan fiscal… ¿por qué el propio PAC terminó cediendo ante el lobby “secreto” dando a entender que ya “tocaron” a las cooperativas por otro lado —cosquillas— mieeeeeeentras a la vez le piden a todos los costarricenses que entendamos que todos tenemos que sacrificarnos? Tremenda incongruencia en el fondo y tremendo relajo en la forma (negociando a espaldas de la ciudadanía…).
— De paso: tremendo carácter el de Solís y el de Aguilar. Lo menos que merecen los costarricenses es claridad y transparencia, especialmente en momentos tan complejos como estos. Aquí no se trata de si se está a favor o en contra de X o Y, se trata de saber qué se resolvió, por qué se resolvió y quién lo resolvió.
— Así las cosas nuestra taza en alto para la diputada Solís. ¡No le merme!
Esta nota es parte del Reporte: Iglesia de por medio, los sindicatos aceptan hablar con el Gobierno (pero la huelga continúa) del 18 de setiembre del 2018.