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COVID-19 en Costa Rica

La Cámara Costarricense de Restaurantes (CACORE) convocó este jueves a una videoconferencia de prensa para comunicar que, tras las medidas que ha tomado el Poder Ejecutivo para detener la curva de contagio de COVID-19, el 42% de los restaurantes del país ha cerrado, trayendo cifras de desempleo para más de 100 mil personas.

Así lo señaló la directora de la cámara, Clemencia Palomo Leitón:

Dentro del sondeo que hicimos son 7980 los negocios que han cerrado, un 42% de los restaurantes, sodas, bares y restaurantes de hoteles. Todavía subsistimos 11020. La población total es de 228 mil colaboradores pero de ellos y dada la cantidad de negocios que han cerrado, ya hoy estamos sumando en el gremio a 109.440 personas desempleadas".

La representante del sector agregó, además, que en los negocios que todavía continúan laborando, hay 72.322 personas que en este momento están con suspensión temporal o con jornadas reducidas y solo 46.238 continúan en un estatus de colaboradores activos con sus garantías completas.

Los datos presentados señalaron que además, las pérdidas económicas para el gremio ascienden a más del 80% respecto a los ingresos recibidos en épocas anteriores y que los salones en este momento solo están recibiendo un 5% de comensales.

Estos datos, según Palomo, significan que "el sector laboral de saloneros está muy afectado. Ellos prácticamente se están quedando sin ese 70% de sus ingresos, resultado de las propinas".

Los resultados se basan en una encuesta aplicada el 24 de marzo anterior a los comercios asociados a la cámara.

La directora aseguró que el gremio se está apegando a todo lo que el Ministerio de Salud ha señalado pero pidieron mayores protocolos al Poder Ejecutivo "para que nos dé luces" sobre qué hacer en caso de que un colaborador de algún restaurante, resultase enfermo o cuáles son los días que los restaurantes deben cerrar del todo.

Además, el sector hizo un llamado para que se tomen medidas en el plano económico para palear la situación que están afrontando estos negocios. Entre ellas destacan la solicitud que realizó CACORE a los arrendatarios comerciales, para que que se sienten a negociar con sus inquilinos de locales a buscar alternativas entre las partes. Por otro lado, la cámara hizo una solicitud directa a las autoridades de gobierno para que entre otras cosas, velen por la seguridad de los establecimientos, pues ya tienen registro de asaltos a locales comerciales en esta última semana.

El sector también solicitó que se tomen medidas financieras para los comercios afectados, como la aplicación en los bancos de una tasa de salvamento especializada para atender el pago de planillas, aguinaldo, vacaciones y prestaciones; y la implementación de una moratoria en el cobro de patentes comerciales, licencia de licores e impuestos territorial, servicios urbanos y bienes inmuebles durante el plazo de la emergencia nacional. A su vez solicitaron la condonación de tres meses en los servicios de electricidad, agua e Internet, medidas principalmente dirigidas a PYMES y micro empresas.

Por su parte, y para el caso particular de los empleados que están viendo cesados sus ingresos, CACORE solicitó un subsidio de los primeros 10.000 colones por recibo de luz e Internet para cada persona que demuestre haber sido afectado por los cierres de negocio; y la condonación de tres meses en las tarifas de agua y en el 50% de los intereses de las tarjetas de crédito.

Según señaló Jorge Figueroa Vásquez, miembro de Junta de CACORE, "los empresarios están haciendo todo lo posible por retener al personal, pero de continuar las medidas sin obtener más ayuda, especialmente del Gobierno, es probable que se tengan que realizar más despidos, más reducciones de jornadas y la recuperación de estos negocios sería extremadamente difícil".