En colaboración con:
Colaboración con agencia

Tras su rápido crecimiento, la marca proyecta nuevas aperturas en Costa Rica y mercados internacionales.

Hace apenas un año, los hermanos Rachel y Salomón Leiderman lanzaron Cacao Cartel, una chocolatería especializada en bombonería y productos premium que nació con una visión ambiciosa: devolverle al cacao costarricense el sitial de excelencia que nunca debió perder. Convencidos del potencial gastronómico y económico de este fruto, decidieron construir una marca que demostrara que Costa Rica produce cacao de clase mundial.

Esa convicción los llevó a trabajar con cacao cultivado en Sarapiquí, reconocido por su calidad excepcional. “Es un cacao que nos permite obtener un chocolate de sabor intenso, con notas frutales, matices de nuez y almendra, y una acidez natural muy equilibrada. Estamos hablando de un producto premium 100% nacional que compite sin complejos con los mejores del mundo”, explica Rachel Leiderman.

Pero la calidad de la materia prima es solo el punto de partida. Cacao Cartel adoptó el modelo bean-to-bar, un proceso artesanal que controla cada fase: desde la cosecha manual de mazorcas seleccionadas, la fermentación y el secado, hasta el tostado preciso, el descascarillado y la molienda fina que define la textura. A esto se suma el conchado, que aporta suavidad y complejidad aromática, y el templado, que garantiza brillo, estructura y estabilidad. Cada barra y bombón se moldea y empaca a mano, asegurando una producción cuidada que compite con la tradición chocolatera de Suiza o Bélgica.

Productos estrella y un concepto que marca tendencia

Gracias a este proceso meticuloso, Cacao Cartel ha desarrollado una línea única, con identidad propia, que incluye productos emblemáticos como la Barra Viral de Dubái, los cigarros de chocolate, las fresas de Dubái, los corazones de bombón y su barra gigante premium, entre otros. 

“Nuestro mayor diferencial es que no somos una chocolatería de producción masiva. Cada pieza nace del concepto ‘de la cosecha a la barra’, lo que nos permite ofrecer calidad superior y una experiencia sensorial auténtica”, destaca Salomón Leiderman.

El éxito del primer año confirma que el mercado costarricense valora las propuestas artesanales, elaboradas con materia prima fresca y procesos cuidados. Este respaldo ha impulsado a la marca a planificar nuevas aperturas tanto dentro del país como en mercados internacionales. 

“Hoy no existe en Costa Rica otra chocolatería con un concepto como el de Cacao Cartel, y el crecimiento que vemos día a día nos demuestra que el consumidor busca experiencias únicas y de alto nivel”, concluye Salomón.

Le invitamos a visitar en Instagram @cacao.cartel y www.cacaocartel.com