El Programa de Apoyo Permanente a Escuelas Indígenas trabajó en Boruca, Curré y Talamanca entre 2020 y 2024.

La Universidad Nacional (UNA) culminó cinco años de trabajo académico en territorios indígenas con el cierre del Programa de Apoyo Permanente a Escuelas Indígenas, ejecutado por la División de Educación Rural (DER) del Centro de Investigación y Docencia en Educación (Cide).

El programa, vigente de 2020 a 2024, consolidó acciones de investigación, extensión y cooperación internacional para fortalecer la educación intercultural bilingüe y la preservación de los idiomas originarios de Costa Rica.

Durante el quinquenio, el equipo académico desarrolló procesos de acompañamiento docente, producción de materiales educativos, giras académicas, talleres en comunidades y participación en redes internacionales. Las principales zonas de trabajo fueron Boruca, Curré y Talamanca, donde se generaron experiencias significativas de revitalización lingüística y educación contextualizada.

Federico Guevara Víquez, coordinador del programa y académico de la DER, comentó:

El trabajo desarrollado con las comunidades permitió avanzar en procesos de revitalización lingüística con docentes de lengua y cultura, quienes asumieron un rol activo en la enseñanza del idioma brunca en las escuelas”.

El PPAA nació con el propósito de acompañar al sistema educativo costarricense en la aplicación de políticas públicas dirigidas a los pueblos indígenas, en concordancia con los derechos culturales y lingüísticos reconocidos por el Estado.

Desde su creación, articuló esfuerzos con las direcciones regionales del Ministerio de Educación Pública (MEP) y los Consejos Locales de Educación Indígena (CLEI) de cada territorio.

Su enfoque principal combinó la investigación participativa y la acción pedagógica en las aulas. En Boruca y Curré, por ejemplo, el programa impulsó el proyecto Upshigrajdin Di Tegat Yet, dedicado a la enseñanza del idioma brunca como segunda lengua. Esta iniciativa integró a docentes de lengua y cultura, supervisores de circuito y autoridades educativas del territorio.

A lo largo de tres años, los participantes recibieron capacitación en metodologías de enseñanza bilingüe, técnicas de planificación didáctica y estrategias fonológicas para contextos donde el idioma presenta un alto grado de desplazamiento. Los resultados incluyeron un documental de 46 minutos que registra el proceso de trabajo con los docentes y un artículo académico registrado que analiza los alcances de la experiencia.

Guevara destacó que estos productos constituyen evidencia del compromiso del equipo académico con la construcción colectiva del conocimiento intercultural.

El trabajo con los territorios de Boruca y Curré permitió un proceso de revitalización lingüística con docentes de lengua y cultura, con metodologías que fortalecen el aprendizaje y la identidad desde la escuela.”

Aprendizaje desde los territorios

El programa desarrolló en Talamanca diversas acciones para fortalecer la educación intercultural, entre ellas el seguimiento al Plan Piloto Namu Wokir, talleres de mediación pedagógica, evaluación educativa y planeamiento contextualizado.

La académica Carolina Arias Ortiz destacó que esta experiencia permitió comprender la diversidad cultural de las regiones indígenas y la necesidad de abordar los desafíos educativos desde un enfoque interdisciplinario.

El programa impulsó espacios de diálogo comunitario, como el Consejo de Participación Comunal de la Dirección Regional de Sulá, donde se discutieron temas de lengua, cultura y rendimiento académico.

Además, los investigadores Federico Guevara y Arias Ortiz presentaron en Londres la ponencia “Una mirada crítica a las políticas educativas en los territorios indígenas de Costa Rica”, durante el Congreso del Royal Institute of Anthropology, lo que visibilizó el trabajo de la Universidad Nacional (UNA) ante la comunidad académica internacional.

Entre los productos del cierre destacan el libro “El Programa de Apoyo Permanente a Escuelas Indígenas de la DER: experiencias en Educación Intercultural y revitalización lingüística”, un documento sobre derechos culturales y lingüísticos y materiales audiovisuales que recogen la experiencia en las comunidades.

Aunque el proyecto concluyó en diciembre de 2024, la DER mantiene vínculos con las comunidades y redes internacionales, y proyecta nuevas iniciativas de formación docente, producción de materiales bilingües y sistematización de experiencias para fortalecer la educación indígena en Costa Rica.