El Fondo Voluntario Colones B de BN Vital muestra rentabilidades destacadas en el plazo de 3, 5 y 10 años, según información de Supen.
En un entorno donde las pensiones básicas enfrentan desafíos y la esperanza de vida continúa en aumento, cada vez más personas buscan alternativas para construir un retiro digno. Los fondos voluntarios de pensiones se han consolidado como una opción complementaria al ahorro obligatorio, y su comportamiento en el plazo de 3, 5 y 10 años hacia atrás —según datos públicos disponibles de la Superintendencia de Pensiones (Supen)— permite comprender mejor su potencial como herramienta de planificación financiera.
Los planes voluntarios de pensiones permiten que cualquier persona, asalariada, independiente o menor de edad bajo tutela, pueda iniciar su plan con aportes desde ₡5.000 o $50 mensuales. Este tipo de ahorro, administrado por operadoras autorizadas, complementa los regímenes obligatorios como el Régimen de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) y el Régimen Obligatorio de Pensiones (ROP).
Estos aportes pueden deducir el impuesto de la renta y de las cargas sociales, lo que representa un alivio fiscal. Dichas exenciones no podrán superar el 10% del ingreso bruto mensual del trabajador o el 10% del ingreso bruto anual de personas físicas con actividades lucrativas. Los rendimientos generados están libres de impuestos, lo que permite que el dinero crezca de forma más eficiente.
Entre sus beneficios destacan la flexibilidad, la seguridad jurídica (los fondos son inembargables y no pueden ser cedidos ni gravados) y la designación de beneficiarios en caso de fallecimiento.
Los Fondos Voluntarios Tipo B (crecimiento) ofrecen liquidez después de 66 meses de maduración y 66 aportes mensuales. Cumplido este plazo, el afiliado puede trasladar su fondo a un Plan A (liquidez), que permite disponer de los recursos, con un retiro total, o parcial de hasta 30% anual o las opciones que la ley tenga para ser utilizado como un complemento a la pensión. También existen opciones de retiro anticipado por invalidez, enfermedad terminal o desempleo prolongado.
Se sugiere que los afiliados menores de 55 años permanezcan en el Fondo Voluntario B, ya que este fondo está diseñado para favorecer el crecimiento del ahorro en el mediano y largo plazo. Para quienes están cerca de pensionarse, se recomienda considerar el traslado al Fondo Voluntario Tipo A, que ofrece mayor liquidez y flujo estable para complementar la pensión del IVM y del ROP.
Un principio clave en esta estrategia de ahorro es la capitalización de intereses. Esto significa que los rendimientos generados se reinvierten junto con el capital original, lo que permite un crecimiento acumulativo.
A continuación, se presentan las rentabilidades de los Fondos Voluntarios Tipo B (crecimiento) de 3, 5 y 10 años al cierre de setiembre de 2025. Estas cifras reflejan el comportamiento histórico de este tipo de inversión.
(1) Información con base en cifras suministradas por SUPEN con cierre a setiembre 2025. La información de la rentabilidad puede encontrarse en la página de internet de la SUPEN: www.supen.fi.cr .
(2) Rentabilidad bruta. Tenga presente que la rentabilidad de un fondo es variable, por lo que no se garantiza que las rentabilidades pasadas se mantengan en el futuro.
Como se aprecia de la información anterior, BN Vital ha podido a lo largo de años mantenerse en el lugar de privilegio, todo en favor del bienestar del capital de cada afiliado.
La rentabilidad del fondo es variable, por lo que no se garantiza que las rentabilidades pasadas se mantengan en el futuro. La información de la rentabilidad puede encontrarse en la página de internet de la SUPEN.
¿Cómo comprender la rentabilidad de los fondos de pensiones?
Según Sergio Quevedo, gerente de Inversiones de BN Vital, es fundamental que el afiliado revise su estado de cuenta con una visión de largo plazo (3, 5 y 10 años hacia atrás).
Aunque en el corto plazo (un mes) la rentabilidad puede ser baja o incluso negativa por fluctuaciones de mercado, está demostrado que en el mediano y largo plazo la rentabilidad acumulada siempre es positiva.
BN Vital aplica criterios técnicos para procurar el crecimiento de la inversión, con un balance adecuado frente a los riesgos del mercado.





