Con más de tres décadas en el Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica, la funcionaria combina el rigor científico con la comunicación institucional.

Por más de tres décadas, los retumbos del suelo han sido parte de la vida cotidiana de Floribeth Vega Solano, funcionaria y experta del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (OVSICORI) de la Universidad Nacional (UNA). Su nombre está asociado con la sismología, pero también con la voz institucional que informa y orienta a la población cuando la naturaleza se manifiesta.

Nacida en Ipís de Guadalupe, Goicoechea, y residente en Barva de Heredia, Vega Solano ingresó al OVSICORI a inicios de los años noventa, tras egresar de la Escuela de Geografía de la UNA. Desde entonces, ha dedicado su carrera profesional a estudiar los movimientos del planeta y a traducirlos en información comprensible para la sociedad.

Mi función principal es con los sismos: mantener el catálogo al día porque es nuestra principal materia prima. Pero uno en la Universidad tiene que ponerse diferentes uniformes”.

Su trabajo abarca diversas áreas dentro del Observatorio, desde el apoyo en vulcanología hasta la coordinación de las redes sociales institucionales, una tarea que considera clave para acercar la ciencia al público.

Como me encargo también de las redes sociales, tengo que estar en contacto con los compañeros que hacen trabajo de campo. Ellos me envían fotos y videos, y yo hago la edición para difundir lo que hacemos. Es muy importante que la población esté informada sobre lo que ocurre en el país”, explicó.

Su vinculación constante con los medios de comunicación ha hecho que en más de una ocasión se le relacione con el periodismo.

Mucha gente pensaba que yo era periodista, tal vez porque atendía a los medios y les enviaba la información o los videos que generamos en el OVSICORI. Para mí es muy importante la imagen que se tenga del Observatorio y de sus investigadores”.

Con formación complementada por cursos de especialización en Noruega y otros países de América Latina, Vega Solano ha fortalecido los procesos técnicos y comunicativos del OVSICORI. Su trabajo conjuga la precisión científica con la comprensión de que detrás de cada sismo o erupción hay una ciudadanía que necesita informarse con calma y claridad.

Tras más de 35 años de servicio, ha sido testigo de la evolución de la tecnología y de la manera en que el país se informa sobre los fenómenos naturales.

Después de tantos años, para mí trabajar en el OVSICORI es un orgullo. Es un trabajo que no cualquiera hace, y me genera mucho orgullo ser parte de algo tan importante para el país”.

Detrás de cada reporte, cada video que circula en redes sociales o cada publicación que explica el comportamiento de la Tierra, está su labor. Floribeth Vega Solano es una figura clave en la historia del OVSICORI y de la Universidad Nacional, un puente constante entre la ciencia y la ciudadanía.