Del 11 al 18 de julio de 2025, la Compañía Inspiraciones Costarricenses llevó la bandera de Costa Rica en la 65.ª edición del Festival Mundial de Danza, celebrado en Schoten, Bélgica.

Con esta participación, el país se hizo presente por cuarta vez en dicho encuentro. Creada en 2006 tras recibir una invitación internacional, la agrupación cuenta con casi cien integrantes —músicos, bailarines y personal administrativo— y tiene como propósito principal difundir el folclore costarricense a través de la música y la danza tradicionales.

A pesar de su notable contribución cultural, la compañía enfrenta importantes desafíos financieros al no contar con respaldo del Ministerio de Cultura, de Relaciones Exteriores ni de la Presidencia. Por ello, cada miembro debe sufragar sus propios gastos —pasajes aéreos, vestuario, logística, etc.—. Según Petter Chinchilla, director del grupo, la inversión total de los 39 participantes rondó los 72.000 dólares. Por fortuna, el festival asumió los costos de alojamiento, alimentación y transporte local.

Durante su estancia en Europa, el grupo recorrió ciudades como Bruselas, Brujas y Ámsterdam y degustaron la cocina local, sobresaliendo el estofado belga y las papas fritas, aunque varios confesaron echar de menos el “gallo pinto”. Además, el festival se convirtió en un espacio de intercambio cultural que les permitió interactuar con agrupaciones de otros países y estrechar lazos de amistad.

El festival llegó a su fin con una gala vibrante, teñida de música y color, en la que la compañía dejó una marca imborrable gracias a su energía, su talento y nuestro inconfundible “Pura Vida”. La fiesta de clausura puso el broche de oro al evento, convirtiendo Schoten en un bullicioso epicentro de celebración. Y pese a los retos económicos, el grupo continúa avanzando, reafirmando su arraigo en la cultura nacional y llevando con orgullo el nombre de Costa Rica a escenarios internacionales.

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