Colegio exige a las autoridades establecer políticas y acciones que garanticen una sociedad inclusiva.
El Colegio de Trabajadores Sociales de Costa Rica (Coltras), manifestó su "profunda preocupación" ante las múltiples formas de discriminación, exclusión y violencia que enfrentan las personas menores de edad LGTBIQ+, en distintos ámbitos de su vida cotidiana.
En un comunicado a la prensa señalaron que actualmente niñas, niños y adolescentes, cuyas orientaciones sexuales, identidades o expresiones de género no se ajustan a las normas heteronormativas ni binarias impuestas social y culturalmente, continúan siendo objeto de estigmatización, violencia simbólica y estructural.
Es claro que estas condiciones afectan gravemente el ejercicio pleno de sus derechos humanos, por ello, el Coltras alza la voz y exige a las autoridades establecer políticas y acciones que garanticen una sociedad inclusiva, solidaria y respetuosa de todas las identidades y expresiones".
Los profesionales recordaron que las personas menores de edad LGTBIQ+ son una población históricamente invisibilizada y marginada, que enfrenta "obstáculos sistemáticos para acceder a derechos fundamentales como la identidad, salud integral, educación, integridad personal, acceso a la justicia, participación y no discriminación".
El colegio detalló que la situación representa una clara violación a las obligaciones del Estado costarricense, conforme a lo dispuesto en instrumentos nacionales e internacionales como el Código de la Niñez y la Adolescencia, la Convención sobre los Derechos del Niño, la Convención Americana sobre Derechos Humanos y la Opinión Consultiva OC-24/17 de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Marina Cruz, representante del Colegio de Trabajadores Sociales de Costa Rica, comentó:
Desde la profesión del Trabajo Social, reiteramos que la inclusión de las personas menores de edad LGTBI no es una opción, sino una responsabilidad jurídica, ética y política del Estado y sus instituciones. Porque la defensa de los derechos de esta población, es una responsabilidad colectiva, impostergable e irrenunciable”.
En este sentido, rechazaron categóricamente cualquier forma de discriminación por orientación sexual, identidad o expresión de género hacia las personas menores de edad. Además, instan a las instituciones públicas y privadas a garantizar entornos libres de violencia y discriminación en todos los espacios donde participan personas menores de edad, incluidos centros educativos, de salud, instituciones estatales, familias y comunidades.
Exigimos al Estado costarricense el cumplimiento de su deber legal de garantizar el ejercicio pleno de los derechos de esta población, incluyendo el derecho a la salud, educación, identidad, participación, justicia, seguridad y bienestar emocional”.
Además, el colegio reitera la necesidad de fortalecer la educación integral en sexualidad, la atención en salud, el acompañamiento psicosocial y demás servicios públicos desde un enfoque de derechos humanos, género y diversidad.
En su mensaje, el colegio llama a la formulación de políticas públicas inclusivas que respondan a las realidades y necesidades específicas de esta población, desde un enfoque interseccional y de derechos.