
A partir del 4 de agosto, Costa Rica estrenará TRIBU-CR, una nueva plataforma digital que facilitará los trámites tributarios, haciendo más simple, rápido y transparente el cumplimiento de las obligaciones fiscales.
Este cambio, impulsado por el Ministerio de Hacienda, tiene como objetivo modernizar la relación entre el contribuyente y la autoridad fiscal, optimizando tanto el cumplimiento de las obligaciones tributarias como el acceso a servicios digitales.
TRIBU-CR sustituirá a la actual Administración Tributaria Virtual (ATV) y estará centrada en la experiencia del usuario, ofreciendo una interfaz más intuitiva y funcional. Entre las principales novedades destacan el expediente electrónico del contribuyente, el acceso a un estado de cuenta tributario actualizado en tiempo real, y una mayor personalización de las obligaciones fiscales según la actividad económica declarada.
Para Luis Alberto Anzoátegui, asociado contable de Facio&Cañas, este cambio representa un avance clave hacia un sistema más eficiente y transparente, TRIBU-CR marca un nuevo paradigma en la administración tributaria. Se deja atrás un modelo pasivo y se adopta una lógica de acompañamiento proactivo del contribuyente. Esta transformación va más allá de lo tecnológico: reestructura la forma en que se gestionan las relaciones fiscales en el país, aseguró.
Además del rediseño en la interfaz y experiencia del usuario, TRIBU-CR traerá consigo importantes reformas en la estructura de los comprobantes electrónicos y formularios tributarios. Por ejemplo, se pasará de la versión 4.3 a la 4.4 de los comprobantes electrónicos, lo que implica más de 140 modificaciones técnicas, muchas de ellas aplicables solo a ciertos sectores económicos.
Entre los cambios más relevantes se incluye la obligatoriedad del recibo electrónico de pago, ajustes en la facturación a proveedores no domiciliados, la eliminación de tarifas transitorias del IVA y una mayor trazabilidad en las transacciones.
También se implementará un nuevo formulario para el Impuesto al Valor Agregado (IVA), identificado como D-150, que sustituye al actual D-104. Esta actualización busca simplificar el proceso de declaración, automatizar los cálculos de créditos fiscales y adaptar los formularios a la realidad económica de cada contribuyente.
Un nuevo enfoque de cumplimiento tributario
Uno de los aspectos más innovadores de TRIBU-CR es su capacidad para guiar al contribuyente según su perfil. Ya no será necesario navegar entre múltiples formularios o buscar manualmente las obligaciones pendientes: el sistema mostrará directamente las declaraciones por presentar, adaptadas a la naturaleza del contribuyente, ya sea una sociedad activa, inactiva, asociación o profesional independiente.
Adicionalmente, se eliminará el uso de multiusuarios con una sola cuenta. Cada persona que requiera acceso deberá estar previamente autorizada por el representante legal, lo cual refuerza la seguridad y el control sobre la gestión tributaria.
Retos y oportunidades
A pesar de sus ventajas, el nuevo sistema también presenta algunos retos. Por ejemplo, se eliminará la posibilidad de realizar pagos mediante conectividad bancaria, lo que obligará a los contribuyentes a utilizar exclusivamente la plataforma de TRIBU-CR o realizar pagos de forma presencial. Esta medida ha sido cuestionada por algunos expertos, quienes la consideran un retroceso en términos de simplificación.
Sin embargo, desde el punto de vista legal, los beneficios superan los desafíos. La firma Facio&Cañas considera que esta transformación no solo impactará el cumplimiento tributario, sino también la forma en que las empresas documentan sus operaciones y mitigan riesgos ante la autoridad fiscal.
"Este es el momento para que las organizaciones revisen sus procesos internos, actualicen su cumplimiento normativo y capaciten a su personal”, agrega Anzoátegui. “Las modificaciones son extensas y requieren de un acompañamiento técnico y legal para garantizar una correcta adaptación”.
TRIBU-CR no es solo una plataforma, es una apuesta por la eficiencia tributaria, la transparencia institucional y la transformación digital del país. A medida que se acerque la fecha de implementación, será clave que empresas, profesionales y ciudadanos se mantengan informados, actualicen su información fiscal y busquen el acompañamiento adecuado para afrontar esta nueva era en la gestión tributaria costarricense.