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En el Día Mundial de la Seguridad Vial, se hace un llamado a la importancia del mantenimiento preventivo del vehículo para proteger a las personas a bordo y a quienes se mueven en las vías.

La industria automotriz está en constante desarrollo de tecnologías que funcionan como asistentes de conducción. Por ejemplo, sistemas de frenado en terrenos difíciles, control de estabilidad y alertas que advierten de salidas de carril y riesgos de colisión.

Sin embargo, es importante recordar que aunque los vehículos estén equipados con tecnología para velar por la seguridad de sus ocupantes, es responsabilidad del conductor estar atento y detectar a tiempo señales como sonidos inusuales, luces de alerta en el tablero o variaciones en el frenado.

Precisamente, en el marco del Día Mundial de la Seguridad Vial, es importante recordar que un adecuado mantenimiento del vehículo es necesario para velar por el buen funcionamiento de la parte mecánica y, además, es una forma de proteger vidas tanto de las personas que viajan a bordo como de las que se mueven en las carreteras y aceras.

El gerente de marca de Volkswagen, Ronald Vincent, explicó:

Para Volkswagen, con el respaldo de Grupo Purdy, la seguridad ha sido siempre un pilar esencial, desde la construcción de vehículos con estructuras resistentes hasta incorporación de sistemas de asistencia al conductor. Esto ha permitido que modelos como Nivus o T-Cross hayan obtenido durante años la máxima calificación en seguridad Latin NCA, demostrando su excelente desempeño en protección tanto a los ocupantes del vehículo como a los peatones. Por eso, en el marco del Día Mundial de la Seguridad Vial, queremos recordar que es el conductor quien debe estar atento a las señales del vehículo y dar mantenimiento preventivo para una conducción verdaderamente responsable".

Por este motivo es que Volkswagen comparte una serie de recomendaciones básicas para extender la vida útil del vehículo y garantizar su buen funcionamiento, así como evitar imprevistos al conducir.

  1. Revise los frenos con regularidad: Un sistema de frenos en buen estado es clave para reducir la velocidad a tiempo y evitar siniestros viales. Si se escuchan ruidos al frenar o el pedal se siente diferente a lo usual, la recomendación es llevarlo al taller cuanto antes.
  2. Vigile la presión de las llantas: Andar con las llantas muy infladas o desinfladas puede afectar la estabilidad del vehículo. Se recomienda revisar la presión al menos una vez al mes o antes de salir a carretera.
  3. Cambie el aceite y los filtros a tiempo: El aceite ayuda a que el motor trabaje bien y no se desgaste. Lo ideal es hacer el cambio según lo que indique el manual o según el kilometraje que tenga. Por lo general, este proceso se debe hacer cada 5.000 kilómetros o cada tres a seis meses.
  4. Esté atento al sistema de suspensión: Si el vehículo se siente inestable, rebota más de lo normal o escucha ruidos al pasar, podría haber un problema con la suspensión por lo que revisarla a tiempo puede evitar daños mayores.
  5. Preste atención a las señales del vehículo: Si se encienden luces de alerta en el tablero, como la del motor o el aceite, no las pase por alto. Son indicadores de que el vehículo necesita una revisión. Atenderlos a tiempo puede evitar problemas mayores y gastos innecesarios.

Vincent concluyó:

La seguridad vial no depende únicamente de la tecnología, sino también de cada decisión que se toma al volante. Conducir responsablemente revisando el estado del vehículo y realizar mantenimientos a tiempo son acciones simples que pueden marcar una gran diferencia: no solo ayudan a evitar contratiempos, sino que protegen a las personas que viajan dentro y fuera del vehículo”.