
Según Procomer, en 2024, un 46,88% de las exportaciones de Costa Rica tuvieron como destino Estados Unidos.
Un conjunto de cámaras empresariales y representantes del sector privado, entre ellas la Cámara de Industrias de Costa Rica (CICR), la Asociación de Empresas de Zonas Francas (AZOFRAS), la Cámara Costarricense Norteamericana (AMCHAM), la Cámara de Exportadores de Costa Rica (CADEXCO), la Cámara de Comercio Exterior (CREXEC), la Cámara de Comercio de Costa Rica (CCCR), y la Unión Costarricense de Cámaras de la Empresa Privada (UCCAEP) destacaron la adecuada labor del Ministerio de Comercio Exterior (Comex) y la Promotora de Comercio Exterior (Procomer), por las gestiones que han abierto una ventana de oportunidad al diálogo para discutir la política arancelaria entre Costa Rica y los Estados Unidos.
El sector empresarial reconoce el compromiso y el trabajo constante de Comex y Procomer para lograr restablecer las condiciones arancelarias con Estados Unidos, nuestro principal socio comercial, así como en muchos otros ámbitos. Gracias a estos esfuerzos, se ha confirmado que Costa Rica se encuentra dentro de una lista reducida de socios comerciales que ya cuentan con un espacio en la mesa para construir una ruta hacia la eliminación o reducción de los nuevos aranceles establecidos para exportar productos a Estados Unidos.
Desde el 5 de abril de 2025, está en vigor un arancel denominado "recíproco" del 10%, establecido por el Gobierno de los Estados Unidos en la Orden Ejecutiva de fecha 2 de abril de 2025. Dicha decisión exoneró a algunos productos puntuales y determinó aranceles superiores para ciertos países.
Según las estadísticas que compila y publica Procomer, en 2024, un 46,88% de las exportaciones de Costa Rica tuvieron como destino Estados Unidos, por lo que el país es particularmente sensible a cualquier afectación en el intercambio comercial con este país.
No podemos olvidar que el sector empresarial costarricense enfrenta importantes retos que le restan competitividad, tanto en el mercado local como en el acceso a mercados internacionales. Algunos de estos desafíos son: los altos costos de la electricidad, la apreciación del tipo de cambio, elevadas cargas sociales que pesan sobre la planilla, mal estado de la infraestructura vial y portuaria, y la imposibilidad de contar con mecanismos modernos de contratación acordes con los modelos productivos actuales, entre otros. Esto implica que cualquier otro factor que disminuya la competitividad podría ser irreversible para gran parte del parque empresarial nacional, el cual se encuentra conformado en más de un 80% por PYMES.
Costa Rica, como una economía pequeña y abierta al mundo, requiere de la fluidez del comercio internacional para generar desarrollo económico. Por ello, son fundamentales las medidas que permitan el intercambio comercial sin barreras arancelarias que impacten negativamente el flujo de comercio.